Después de la venta de Isagen a la canadiense Brookfield, la Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo (USO), llevó a cabo un bloque de la entrada a las oficinas principales de Ecopetrol en Bogotá. El sindicato de la petrolera estatal afirma que el próximo activo que venderá el gobierno será Ecopetrol.
Edwin Castaño, presidente de la USO, señaló que como prueba de lo que podría pasar con Ecopetrol, tiene dos cartas que el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, envió en 2013 a los presidentes de la Cámara y el Senado, donde planteó un plan de enajenación de activos del Estado, “y en la lista la primera era Ecopetrol”.
Los sindicalistas dicen que todo apunta hacia ese objetivo, después del despido de 240 trabajadores en noviembre del año pasado y la salida de cientos de empleados de empresas contratistas de la petrolera, “Por eso, en la reunión de esta tarde solicitaremos la terminación de convenios de la empresa con la Policía (por $385 mil millones) y con el Ejército (por $1 billón), porque Ecopetrol no tiene por qué estar firmando este tipo de contratos”, señaló Castaño.
La empresa rechazó el bloqueo al ingreso al edificio principal, que perjudicó el ingreso de los empleados a sus sitios de trabajo. “La compañía respeta ejercicio de la actividad sindical que debe ser realizada conforme a las normas constitucionales y legales. Así mismo, exige que no se afecte la operación”, se expresó en comunicado de la compañía.
La comunicación de Ecopetrol también señaló que los bajos precios del petróleo, “nos exige a todos seguir trabajando en equipo para contribuir a la sostenibilidad de la Empresa y la generación de valor en beneficio de todos los colombianos”, Cerró.