Por Mauricio Botero Caicedo
De acuerdo con informes de prensa, “Sin Simón Trinidad las Farc no firmarán los acuerdos de paz”. En una entrevista, Mark Burton, el abogado norteamericano del comandante de las Farc condenado a 60 años en una cárcel de máxima seguridad en Estados Unidos contesta a un periodista cuando se le hace la pregunta: ¿Cómo va el proceso y que esperanza podemos tener los Colombianos de que pueda él estar en Colombia o que por lo menos pueda ser parte protagónica del proceso de paz? “Yo tengo un poco de optimismo, su estatus ha sido hablado en La Habana, ha sido hablado en la mesa y las FARC han dicho que sin él no van a firmar el acuerdo; por lo menos Iván Márquez ha dicho que está esperando a Simón Trinidad para revisar los acuerdos finales.

También el gobierno de Colombia, creo que reconoce la importancia de Simón Trinidad en este proceso, en Colombia, como personaje, como símbolo, símbolo de resistencia, símbolo de paz también, y ahora los norteamericanos están allí, también facilitando mucha cosa. Entonces el gobierno de Colombia necesita pedirlo para el acuerdo final y yo creo que el gobierno de Estados Unidos tiene que dar este regalo al futuro de Colombia.”

Para el autor de esta nota, la importancia de Simón Trinidad no radica en las babosadas que menciona el abogado Burton como el que Simón es “un personaje, un símbolo de resistencia, un ímbolo de paz también.” La importancia de Simón Trinidad es que es uno de los comandantes de las Farc que más conoce de la involucración de este tenebroso Grupo en el narcotráfico. Simón, que en su anterior vida era un banquero de nombre Ricardo Palmera, era uno de los principales responsables de canalizar los recursos de las Farc en los negocios de la droga, el secuestro y la extorsión. Las Farc lo necesitan con urgencia para que les pueda explicar en dónde exactamente se esconden los inmensos recursos en divisas que durante más de cincuenta años de delinquir las Farc acumularon.

El que las Farc no firmen la paz sin que suelten a Simón Trinidad es un cañazo de mucho cuidado. A los terroristas les conviene enormemente firmar esta paz en que han logrado que sea el país que claudique, y no ellos. Pero no pueden de dejar de hacer esfuerzos para recuperar su platica en el exterior.