–La Armada Nacional entregó este domingo a las autoridades nicaragüenses a los pescadores que el pasado 8 de febrero habían sido abandonados por cuatro embarcaciones del vecino país, luego de ser sorprendidos transportando a bordo 73 hombres que realizaban pesca depredadora en mar territorial colombiano, en cercanías a la isla Cayo Serrana
La entrega se desarrolló en el mar; los pescadores realizaron transbordo a un buque Nicaragüense después de permanecer 5 días en la isla Cayo Serrana donde las unidades de la Armada les prestaron apoyo.
Con este tipo de acciones la Armada Nacional ratifica su compromiso en la defensa de la Soberanía Nacional, la protección de los recursos naturales nacionales y la preservación de la vida humana en el mar, bajo el contexto, en esta ocasión, de la ayuda humanitaria, destaca el comunicado.
Los 73 nicaraguenses fueron detenidos en desarrollo de operaciones de control marítimo, el pasado lunes 8 de febrero, cuando realizaban actividades de pesca depredadora de langosta y caracol Pala dentro del mar territorial colombiano, en la isla cayo de Serrana, ubicada al norte del archipiélago de San Andrés y Providencia.
En la acción se inmovilizo la embarcación de bandera nicaragüense “Doña Emilia”, que transportaba buzos para realizar la extracción de las especies protegidas y en peligro de extinción por su sobreexplotación.
Los pesqueros nicaragüenses Miss Sofía, Capitán Charlie y Lady Frem que se encontraban en mar territorial transportando a los pescadores, al advertir la presencia de la Armada Nacional emprendieron la huida abandonándolos en el lugar, motivo por el cual las unidades de Guardacostas prestaron el apoyo a las personas en el agua, para posteriormente albergarlas en la isla cayo de Serrana en donde recibieron asistencia humanitaria.
Junto con los pescadores se encontró el siguiente material: 34 embarcaciones artesanales tipo “cayuco” con 152 tanques de buceo y aproximadamente 350 kilogramos de Langosta y Caracol de Pala, extraídos del área marina protegida, declarada por la Unesco en el año 2000 como Reserva de Biósfera Sea Flower.
La información de estos hechos fue inmediatamente comunicada al Ministerio de Relaciones Exteriores para las actuaciones pertinentes.