Los más de tres mil vendedores ambulantes que marcharon hoy en Bogotá, manifestándose en contra de las políticas de espacio público de la Administración Distrital, llegaron a su fin sin diálogo con Peñalosa.
“Queremos que el alcalde se siente a dialogar con nosotros, no que nos mande subalternos para que nos digan que nos van a reubicar”, declaró una de las personas manifestantes.
Las marchas respectivas de los vendedores, partieron de varios puntos de la capital, Chapinero, El Cementerio Central y La Carrera décima, y todas se reunieron en la Plaza de Bolívar.
“Las personas encargadas de reubicarnos no saben nada de las ventas ambulantes, e los lugares a los que quieren llevarnos no haríamos una venta diaria de 2 mil pesos”, fue la opinión de otro de los vendedores.
Según los comerciantes informales, las soluciones dadas por el Distrito no les permitirían sobrevivir, mientras que el Distrito asegura que ha facilitado el proceso y ha entregado todas las garantías requeridas para que los vendedores tengan acceso al trabajo y a conseguir con este su sustento.
Entre los grupos de marchantes que participaron, hubo la presencia de asociaciones de casi todas las localidades de la capital del país, exigiendo al alcalde mejorar sus condiciones laborales.