Según la organización internacional DARA el sistema energético intensivo en carbono causa 4,5 millones de fallecimientos anuales y cuesta más del 1% del PIB mundial. El codirector del Banco de la República, Carlos Gustavo Cano ha reiterado la necesidad de una política ambiental de naturaleza fiscal para ayudar a controlar la inflación de alimentos y energía.
La inflación del país ha aumentado en los últimos meses y por lo tanto el costo de vida de todos los colombianos. Esto se evidencia en la variación del índice de precios al consumidor (IPC) publicada por el DANE que en el mes de marzo del presente año fue de 0.94%, superior a la registrada en marzo de 2015, la cual fue de 0,59%. Si bien este crecimiento es producto de diversos factores, no se puede ignorar los efectos del cambio climático en la agricultura, tanto a nivel nacional como de los bienes importados.
El clima extremo impulsará aún más los precios de materias primas como el café, el azúcar, el maíz y la soya. Esto afectará la capacidad de compra de los consumidores y pone en riesgo la recuperación económica de gran parte de los países desarrollados. Países con alta dependencia de los alimentos importados, como Colombia, sufren de inestabilidad ante la variación de precios.
Frente a esta coyuntura, la Bolsa Mercantil de Colombia, reconociendo la importancia de mitigar el cambio climático y el potencial nacional para reducir emisiones de gases efecto invernadero a través de los créditos de carbono, se encuentran en la fase final del proyecto “Mecanismo de Mitigación Voluntaria de Gases Efecto Invernadero para Colombia”.
Este proyecto se realiza junto con la Fundación Natura y la Cámara de Comercio de Bogotá, y con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo. El lanzamiento de esta plataforma transaccional se realizará en los próximos meses y a través de ella se buscará reducir más de 500.000 toneladas de CO2 en los primeros dos años.
El pasado jueves 7 de abril, se realizó la primera sesión del Comité de Estándares de la Bolsa Mercantil de Colombia, en donde los diversos actores se reunieron con el objetivo de definir la ficha técnica de los créditos de carbono con el fin de establecer una definición estándar que sirva de referencia nacional para la negociación de los “créditos verdes” en la Bolsa y los mercados OTC.
Asimismo, como parte del proyecto, se ha incluido una propuesta normativa cuyo objetivo es que la compra y venta de créditos de carbono, generen ciertos beneficios tributarios que permitan a las empresas ahorrar dinero mientras protejan el medio ambiente, especialmente en materia de impuesto sobre la renta e impuesto a las ventas, lo cual coincide con la percepción del codirector del Banco de la República, Carlos Gustavo Cano.
“Aunque Colombia no está entre los países que genera mayor emisión de Gases efecto invernadero, si es uno de los que más sufre los efectos del cambio climático. Los fenómenos como el Niño o la Niña que ocurrían cada cinco años, hoy, ocurren casi cada año y medio, alterando los ciclos de la agricultura.
La Bolsa Mercantil de Colombia genera un impacto positivo para el país al desarrollar y administrar mercados que centralizan las negociaciones, forman precios e integran de manera eficiente a compradores y vendedores”, señaló Francisco Estupiñán, presidente de la Bolsa Mercantil de Colombia.