En el Plan de Desarrollo del alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, se contempla transformar la manera cómo los bogotanos se desplazan hoy en la capital, ya que se busca articular todo un sistema de transporte multimodal para que la ciudad supere el rezago que en materia de movilidad se generó durante la última década.
La estrategia del Distrito promueve inversiones para beneficiar a ciclistas, peatones, motociclistas, usuarios del sistema de transporte público y a los conductores de carros particulares.
Según cifras de la alcaldía, el 40 por ciento de los viajes en Bogotá se realizan en el transporte público, por lo cual se considera que es fundamental ampliarlo y consolidarlo, haciéndolo eficiente, seguro e incluyente.
“La única forma de mejorar el transporte público es convirtiéndolo es una excelente opción que compita con el vehículo particular. Esto lo logramos invirtiendo en infraestructura y articulando de manera efectiva el sistema con otros modos de transporte como la bicicleta”, indicó Juan Pablo Bocarejo, secretario de Movilidad.
Estos son los proyectos que se tienen contemplados:
1.Troncal Villavicencio (NQS y Boyacá).
2.Troncal Caracas, desde Molinos hasta Yomasa.
3.Troncal de la carrera Séptima, desde calle 32 hasta la calle 170.
4.Troncal Av. Ciudad de Cali, desde Bosa hasta la calle 170.
5.Troncal Av. Boyacá.
6.Troncal calle 100, desde la carrera 7 hasta la Avenida Suba.
7.Conexiones de la calle 26 con la Av. Décima y con la NQS
También el Plan de Desarrollo contempla la construcción y mejoras de las vías de la ciudad y sobre todo las conexiones necesarias con los municipios vecinos.
Estos son los proyectos contemplados:
1.Av. Centenario – calle 13, desde el río Bogotá hasta la NQS.
2.Autopista Norte, desde la calle 170 hasta los límites del Distrito.
3.Carrera Séptima, desde la calle 170 hasta los límites del Distrito,
4.La Avenida ALO desde los límites del Distrito con Soacha hasta los límites del Distrito con Chía…
5.La calle 63. Desde la circunvalar hasta la salida de la ciudad por el occidente.
6. La avenida Boyacá.
Por otro lado, se tiene previsto una restructuración del Sistema Transmilenio:
1. Ampliación, adecuación de estaciones y nuevos vagones en 73 estaciones con altos niveles de saturación.
2. Reestructuración del sistema de rutas y servicios para utilizar la flota de manera más eficiente.
3. Renovación de la flota troncal que ha venido operando y cuya vida útil se está cumpliendo.
4. Vigilancia 18 horas al día en la infraestructura troncal, cambio de 1.300 puertas con sistema anticolados, y aumento en 50% del cubrimiento en las barreras de control de acceso, barandas y cerramientos.
5. Programas de cultura ciudadana para que Transmilenio recobre su sentido en beneficio de los usuarios y de la ciudad.
“Transmilenio debe volver a convertirse no solo en motivo de orgullo para los bogotanos, sino seguir siendo ejemplo de desarrollo de transporte público para Colombia, Latinoamérica y el mundo. Mejorar la calidad de vida será posible en la medida en que el Sistema Integrado de Transporte Público sea un verdadero agente de democratización urbana”, afirmó Alexandra Rojas, gerente general de Transmilenio.
Por último, el Distrito implementará un sistema de gestión y control de la demanda de transporte el cual contará, por ejemplo, con la renovación en cerca de 1.000 intersecciones de la red semafórica a regulación actuada, con la cual los semáforos permiten el tránsito de vehículos según la demanda en cada uno de estos puntos.