Indonesia implanta la pena de muerte y la castración química para violadores de niños y niñas
–Bajo la conmoción causada por la brutal violación en grupo y asesinato de una niña, el presidente de Indonesia Joko Widodo anunció la implantación en su país de nuevas y duras penas para los delincuentes sexuales, incluyendo la pena de muerte y la castración química.
Con la introducción de la castración química, Indonesia se une a un pequeño grupo que utilizan el castigo en todo el mundo, incluyendo Polonia y algunos estados de los EE.UU., destaca el diario The Guardian, al informar sobre la decisión del mandatario indonesio.
Advierte, además que en 2011, Corea del Sur se convirtió en el primer país asiático en la legalización de la pena.
Conforme al decreto presidencial, a los pederastas condenados se les obligará también a llevar dispositivos electrónicos de monitoreo tras las expiración de la pena.
El diario señala que el presidente Widodo no dio más detalles sobre el etiquetado de los sospechosos de dispositivos de control. Los medios locales informaron previamente que un microchip podría ser implantado en las piernas depredadores sexuales de niños ‘en su salida de la cárcel”, añade.
El presidente Joko Widodo señaló que las nuevas medidas adoptadas “tienen por objeto superar la crisis provocada por la violencia sexual contra los niños”.
“Los crímenes sexuales contra niños son crímenes extraordinarios, ya que amenazan la vida de los niños”, agregó Widodo en el palacio presidencial en Yakarta.
El decreto presidencial trae los nuevos castigos en efecto inmediato, aunque el parlamento podría revocarlo más tarde.
La decisión presidencial se produjo como consecuencia de la violación y asesinato, en abril de una niña de 14 años de edad, hecho que por parte de un grupo de hombres y muchachos borrachos, que atacó a la menor cuando se dirigía de la escuela hacia su residencia en la isla occidental de Sumatra.
Su cuerpo fue encontrado tres días después en el bosque, atado y desnudo. Por este atroz crimen fueron encarcelados a principios de este mes siete adolescentes, 16 y 17 años.
El ataque provocó un debate nacional sobre la violencia sexual, condujo a las peticiones de penas más severas para los delincuentes sexuales de niños y provocó protestas en la capital Jakarta.
El caso ha sido comparado con la fatal violación en grupo de un estudiante en un autobús en Nueva Delhi en 2012, lo que provocó protestas masivas y dio lugar a una revisión de las leyes de violación de la India.
Indonesia es probable que lo hagan fuego para la ampliación de su uso de la pena de muerte. Yakarta ha enfrentado críticas por usar su uso de la pena capital contra los traficantes de drogas, y provocó la indignación internacional el año pasado, cuando se puso siete convictos de drogas extranjeros a muerte por fusilamiento.
Bajo las leyes anteriores, la pena máxima por violación – incluyendo a un menor – fue de 14 años de cárcel.