El primer ministro de Turquía, Binali Yildirim, informó que un grupo militar participó de un “levantamiento” en el seno de las fuerzas armadas, en lo que parecía un intento de golpe militar.
Yildirim declaró a la televisora NTV: “Es correcto que hubo un intento”. El primer ministro no dio más detalles, pero dijo que el gobierno del presidente Recip Erdogan nunca permitiría ninguna “iniciativa que interrumpa la democracia”.
La declaración del premier se produjo mientras el gobierno ordenaba el cierre de los puentes sobere el Bósforo en la ciudad de Estambul, y el cielo de Ankara, la capital del país, era surcado por aviones militares y se oían algunos disparos de armas de fuego.
Reportes de prensa informaron que había ambulancias frente a los cuarteles del ejército turco.
Los militares turcos han sido históricamente los garantes de la laicización del país y un bastión contra la islamización de la sociedad.
Desde hace tiempo los analistas comentan en que hay sectores castrenses que se oponen a los intentos del presidente Erdogan de dar más espacio a los usos islámicos en la vida pública del país.
AP.