Veintidós días después de reunirse con las familias de El Carmen de Bolívar en Turbaco, el ministro de Salud y Protección Social, Alejandro Gaviria Uribe, volvió a encontrarse con ellas, pero esta vez en su propio municipio.
El propósito de la reunión, llevada a cabo en la Institución Educativa Técnica Industrial de El Carmen de Bolívar, fue hacer seguimiento a los compromisos adquiridos el pasado 14 de julio y seguir escuchando las necesidades de la población en materia de salud.
De hecho, previo al encuentro con las familias, el ministro recorrió las instalaciones y conversó con los directivos del Hospital Nuestra Señora del Carmen y de la ESE Giovanni Cristini en compañía del gobernador de Bolívar, Dumek Turbay.
La reunión con las familias concluyó con una serie de nuevos compromisos, relacionados con la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), la dotación en salud en los corregimientos, la calidad de los servicios de las EPS en la región y la humanización de la atención.
Respecto a la vacuna, el ministro se comprometió a compartir con la comunidad el resultado de la revisión que tres universidades públicas harán de las conclusiones que sobre el particular ha entregado el Instituto Nacional de Salud, y a encomendar un estudio a una organización independiente.
Otro de los acuerdos fue, como lo expresó el ministro, “hacer del problema una oportunidad” para que, más allá de la atención a las niñas y adolescentes, se mejore la dotación de los puestos de salud de los corregimientos de Macayepo y Caracolí. En este contexto será entregada una unidad móvil al municipio, y se trabajará en la recuperación financiera del hospital de primer nivel Giovanni Cristini.
El titular de la cartera de salud también adquirió el compromiso de ordenar a la Superintendencia de Salud que estudie las quejas que la comunidad ha presentado por el servicio que ofrecen las EPS que operan en la región. A este respecto se programará una reunión para superar los inconvenientes que se han presentado para obtener citas con especialistas y los problemas con el trasporte de las pacientes desde las veredas hasta la cabecera municipal, o desde esta hasta Cartagena o Barranquilla.
Gaviria Uribe reiteró la necesidad de trabajar por la humanización de la atención. “Tenemos que tratarnos bien –reclamó el ministro–. Había mucha hostilidad en la interacción en el hospital: tanto de parte de los trabajadores de la salud hacia la comunidad como viceversa, de la comunidad hacia los trabajadores de la salud”.
Pese a las dificultades, al cierre del encuentro el titular de la cartera calificó de productivo el evento y reiteró que el Ministerio seguirá trabajando por la salud de los carmeros.