–Ante los sobrevivientes de la masacre de las Farc en Bojayá, Chocó, el presidente Juan Manuel Santos anunció este domingo que los 8 millones de coronas suecas del premio monetario del Nobel de Paz lo donará para reparar a las víctimas del conflicto armado en Colombia.

Al mismo tiempo, el presidente Santos envió un mensaje de tranquilidad a las víctimas, al señalar que va a perseverar, a persistir y persistir para implementar los acuerdos firmados con la guerrilla de las Farc y reiteró que si hay que hacerle ajustes lo hará.

Sobre la decisión de donar el premio monetario del Nobel de Paz, Santos dijo que la tomó la noche de este sábado en consenso con su familia.

“Este gran Premio Nobel, que algunos lo consideran el más importante de todo el planeta, viene acompañado de un premio también monetario, 8 millones de coronas suecas. Quiero anunciarles que anoche me reuní con mi familia y hemos tomado la decisión de donar esas 8 millones de coronas suecas para que las víctimas puedan ser reparadas”, explicó.

“Vamos a decidir obras o fundaciones, o programas que tengan que ver con víctimas y reconciliación”, indicó.

El mandatario reiteró que el galardón que le otorgó la Academia sueca es para todas las víctimas y es un mandato para seguir buscando y consolidando la paz en Colombia.

“Este reconocimiento mundial es para todas las víctimas, para ustedes”, dijo.

En el caso de Bojayá, el presidente Santos advirtió que simbolizan las víctimas de 52 años de guerra en Colombia. Representan lo malo y lo bueno de esta guerra, que han dado una lección al mundo que con fuerza espiritual y capacidad de perdón, se puede hacer la reconciliación.

“Ustedes simbolizan el sufrimiento de las víctimas en 52 años de guerra, son el centro de la solución de este conflicto”, expresó.

“Las víctimas me han enseñado que la capacidad de perdón puede vencer el odio y el rencor”, complementó.

Uno de los emotivos hechos que se produjo al término de la eucaristía celebrada en la iglesia de Bojayá, fue la entrega que le hizo la comunidad al presidente Santos: El Cristo Mutilado, una réplica de la imagen que quedó sin brazos y ni piernas el 2 de mayo de 2002 por la explosión del cilindro bomba que lanzó la guerrilla de las Farc contra el mismo templo y masacró a más de un centenar de habitantes, entre niños, niñas, adultos y ancianos.

Al respecto, en su discurso, Santos dijo que al igual que el Premio Nobel, el Cristo Mutilado lo recibía como un mandato de los millones de víctimas del conflicto a lo largo y ancho del país para hacer realidad la paz en Colombia.

La liturgia se realizó en la iglesia San Pablo Apóstol, en la cabecera municipal de la localidad de Bellavista, oficiada por los sacerdotes Sterlin Londoño Palacios, vicario de la pastoral de la Diócesis de Quibdó y el párroco del templo, Álvaro Hernán Mosquera Asprilla.

Tal como lo hicieron en Cartagena el pasado 26 de septiembre cuando se firmó el pacto del fin del conflicto con las Farc, las “alabadoras” de Bojayá –que esta vez lucieron blusas blancas–le cantaron al presidente Santos: “Que se cumpla lo pactado, que se cumpla lo pactado…”.

“Que Dios los bendiga. Este premio es de ustedes y por ustedes lucharé por el resto de mi vida”, les repondió luego Santos.

También anunció que “escucharemos con buena voluntad a quienes han tenido reparos sobre el acuerdo de paz” y les garantizó la seguridad de que se implementará” y se pondrá en practica.

“Recorreré el país diciéndoles que no se preocupen. Su deseo de paz se hará realidad. Me encargaré de que así sea”, dijo y añadió:

“Tengan la absoluta seguridad, tengan ustedes toda la tranquilidad, que este proceso lo llevaremos a buen puerto. No voy a desfallecer un solo minuto; no me voy a rendir un solo segundo. Voy a continuar”.