En un evento público, el vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras, ofreció excusas tras el incidente ocurrido en Ciénaga de Oro, Córdoba, en el que el alto funcionario agredió a uno de sus escoltas, durante un evento de Gobierno.
“Le quiero pedir públicamente disculpas por un incidente que no debió haber ocurrido”, aseguró el vicepresidente.
Pidió al escolta Ahumada que le acepte sus disculpas. “Es bastante el tiempo que llevamos juntos y yo reconozco que la tarea siempre es vigilar y cuidar de mi seguridad”, indicó Vargas Lleras.
Manifestó que tiene un gran afecto por este efectivo que ha estado en los últimos años en el esquema de seguridad del alto funcionario.
“Y Yo quiero insistirle a usted y a todos los esquemas de seguridad, y al mío propio, que sean más respetuosos con la ciudadanía”, puntualizó.