Hace pocos años, un grupo de estudiantes de la academia de arte de Hamburgo no estaban muy entusiasmados con la asistencia al curso de caligrafía de Kerstin Carbow. ¿Por qué dominar el arte de la escritura a mano en la era de los teléfonos inteligentes, pantallas táctiles, notas de voz y correos electrónicos?
Hoy, la caligrafista de 52 años, que también trabaja como ilustradora y pintora, dice que cada vez más personas se sienten atraídas por sus seminarios y talleres.
“La mayoría de la gente quiere aprender a expresarse y hacer que sus pensamientos o sentimientos sean visibles con una hermosa escritura.”
Recientes investigaciones demuestran que la enseñanza de las habilidades de escritura a mano beneficia el desarrollo cognitivo y las habilidades motoras y puede conducir a una mejora de las habilidades de escritura y comprensión de lectura. Es por ello por lo que, sin duda, estamos ante una actividad especialmente beneficiosa para el ser humano que no debería perderse en el tiempo.
Tinta en lugar de teclado
Otras formas creativas también han incrementado su popularidad por más de un año, uno de ellos son los libros de adultos para colorear, una clara muestra de como el ser humano está regresando al papel. Para Kerstin Carbow quien es una de las últimas alumnas en estudiar con el famoso tipógrafo Martin Andersch, esto tiene una explicación: “La gente está cada vez más consciente de que nuestra cabeza y nuestros corazones necesitan más que la eficiencia, la velocidad y la última tecnología. Aunque ciertamente han hecho la vida mucho más fácil, también lo han hecho menos creativa. Cuando escribes o pintas, comienzas a enfocar, encuentras tu centro interior y te calmas”.
Sin embargo el renacimiento de la escritura a mano, revela algo más. Muchas personas sienten que mantenerse en contacto a través de aplicaciones de mensajería o enviar videos GIF en lugar de tarjetas de felicitación simplemente no es gratificante en el largo plazo. Las relaciones interpersonales también necesitan gestos especiales de aprecio y compromiso. Una nota manuscrita muestra que se desea agradar a alguien y que se ha tomado el tiempo extra para hacerlo. La calígrafa Kerstin Carbow lo resume diciendo: “La escritura es una manera de celebrar la belleza”.
El boom de los instrumentos de escritura gracias a la tendencia del coloreo
La industria de la papelería está encantada. Los fabricantes alemanes de lápices e implementos de escritura, que se estaban preparando para tiempos difíciles hace apenas unos años han anunciado ventas anuales récord. Los negocios en Alemania crecieron en un asombroso promedio de 6,7 por ciento en el primer trimestre del 2016, según la asociación del papel, los suministros de oficina y la industria de elementos de papelería.
En 2015, las ventas ya han aumentado un 3,9 por ciento. Para Faber-Castell, una empresa de larga herencia, el año fiscal 2015/16 fue el “mejor año de todos” en todos los segmentos – escritura, dibujo y diseño creativo – con unas ventas de 631 millones de euros.
La tendencia no es una gran sorpresa para el Conde Charles von Faber-Castell, representante de la novena generación y responsable de la división premium de la compañía: “En vista de la creciente digitalización, la necesidad de compensar con las actividades analógicas está aumentando. Aunque la tendencia global de colorear para adultos nos sorprendió en su intensidad, la tendencia general hacia la escritura individual -que no es perfecta pero creativa- era previsible hace bastante tiempo”.
Todo movimiento extremo es seguido por un contra-movimiento. ¿Podrá perdurar? Kerstin Carbow dice: “Sí. Actualmente algunas personas optan por el yoga o meditar y otros escribir o pintar. En la vida agitada que llevamos, la escritura a mano será vista como otra oportunidad para frenar y relajarse. La escritura manual seguramente seguirá siendo una manera de aprender y mejorar ciertas habilidades”.
Escribir te hace inteligente
Daniel Oppenheimer, profesor de psicología de la UCLA Anderson School of Management de Los Ángeles, quiso saber cómo se absorbe la información con técnicas modernas en comparación con las convencionales. Dividió un grupo de estudiantes en dos: Uno de ellos tuvo que tomar notas de conferencia a mano, los otros tuvieron que tipearlos en una computadora. Luego se les preguntó sobre el contenido. El grupo de escritura fue mucho mejor – incluso en la segunda ronda donde el material fue proyectado en la pared para que todos lo vieran.
La explicación: como los que tomaban notas escritas no podían escribir todas las palabras, almacenaban más material didáctico en sus cerebros y también distinguían entre los elementos importantes y los menos importantes, resumiéndolos en sus apuntes. Así que se podría decir que escribir es más difícil, pero en última instancia más eficiente y ayuda a conservar más información.
El psicólogo cognitivo Robert Bjork de la Universidad de California lo llama “Dificultad Deseable”. Su teoría que establece que es preciso cierto tipo de esfuerzo para poder realmente hacer algo y mejorar las habilidades se hace inmediatamente evidente cuando se mira a un niño pequeño escribiendo sus primeras letras: Después de varios intentos y de la desesperación y la frustración y exclamando por décima vez que no quiere escribir nunca más, la mirada en su cara cuando finalmente logra escribir su propio nombre en un pedazo de papel es inolvidable.