El secretario de seguridad, Daniel Mejía, dio a conocer el nuevo Centro de Traslado por Protección en donde allí se llevaran a los ciudadanos con alto grado de exaltación que alteren el orden público o que hayan cometido alguna contravención más no un delito.
La inversión, que estuvo entre los 600 y los 800 millones de pesos, busca que la atención sea digna y respetuosa.
El año pasado, varios ciudadanos y medios de comunicación denunciaron las pésimas condiciones así como tratos indignos para los detenidos.
“Por eso no solo decidimos invertir en infraestructura sino en un enfoque de trato diferencial. La idea es preservar la vida quienes lleguen aquí”, aseguró Mejía.
Mejía confirmó que habrá espacios especiales para las personas de la comunidad LGBTI, mujeres y hombres, es decir, cambia el modelo de atención.
De igual forma, habrá trasnformaciones administrativas y de seguridad pues ahora los registros se realizarán en un computador y no como antes que las anotaciones se hacían en un cuaderno.
También habrá dispuestas cámaras de seguridad que serán monitoreadas por la Policía y por la Secretaría de Seguridad y equipos para detección de metales.
Cabe mencionar que el lugar tendrá lugar para unas 400 personas que serán llevadas a diferentes salas para evitar problemas de hacinamiento.
“Aquí estamos cambiando todo el modelo de atención y además realizaremos talleres de convivencia y de justicia restaurativa para prevenir futuros delitos”, afirmó Mejía.