–Un atentado suicida con un coche bomba perpetrado este viernes presuntamente por un miliciano del grupo yihadista Estado Islámico (EI) contra las posiciones de los insurgentes sirios cerca de la ciudad septentional de Al Bab, deja ya 60 muertos, de acuerdo con el último reporte del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La explosión, que sacudió la localidad de Susian, al oeste de Al Bab, la produjo un día después de que fuerzas turcas y sus aliados rebeldes tomaran gran parte del estratégico pueblo de manos del grupo Estado islámico.

El suicida detonó un coche bomba en medio de un reducto de los rebeldes respaldados por Turquía.

De acuerdo con los activistas de derechos humanos, la mayoría de las víctimas mortales son insurgentes.

Según informó el canal panárabe de televisión Al Mayadeen, las fuerzas turcas junto con los rebeldes sirios retomaron el control de Al Bab el jueves, el mismo día que el grupo EI anunció su retirada de la ciudad, su mayor baluarte en el norte de Siria.

El retiro del grupo yihadista se produce después de unos 100 días de combates contra las tropas turcas y los insurgentes sirios, que emprendieron una operación militar denominada “Escudo del Eufrates”.

El nuevo hecho de sangre se produjo en momentos que en Ginebra, Suiza, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, daba la bienvenida a los participantes de la más reciente ronda de conversaciones de paz en Siria, así como a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU y a los representantes del Grupo Internacional de Apoyo a Siria.

“El pueblo sirio busca con desesperación poner fin a este conflicto y ustedes lo saben, son los primeros en decirnos esto”, dijo De Mistura a los participantes, incluyendo a las delegaciones del gobierno y la oposición sirias.

“El pueblo sirio ha sabido durante mucho tiempo que no hay solución militar, sino política”, añadió.

El miércoles, el diplomático advirtió que no espera un gran avance en esta ronda de conversaciones, sino que espera que las próximas reuniones sienten bases para futuras negociaciones en las que se dé una solución política al conflicto de cinco años.

De Mistura también señaló que las negociaciones políticas se realizarán en un contexto geopolítico muy distinto al de las conversaciones del año pasado.

Mantener un frágil cese al fuego y mejorar el acceso humanitario al país devastado por la guerra son factores clave de las conversaciones entre representantes del gobierno sirio y facciones rebeldes que buscan deponer al presidente de Siria, Bashar al-Assad.

Desde que el conflicto sirio inició en marzo de 2011, unas 400.000 personas han muerto y millones han huido de su hogar.(Con información de Xinhua)