Los hermanos Francisco y Catalina Uribe Noguera no aceptaron los cargos que les formuló la Fiscalía por presuntamente haber ocultado las pruebas del secuestro y posterior asesinato que protagonizó Rafael Uribe Noguera contra la pequeña Yuliana Samboní.
Según con la Fiscalía General, los hermanos Uribe Noguera ocultaron elementos materiales probatorios del crimen y se les acusa de destruir y manipular información consignada en tres celulares propiedad tanto de ellos como del mismo Rafael Uribe Noguera.
La Fiscalía asegura que la información estaba consignada en la aplicación de mensajería instantánea Whatsapp y en la totalidad del registro de llamadas, con ocasión de los hechos registrados el pasado 4 de diciembre.
Al parecer, Catalina Uribe habría eliminado las conversaciones y las llamadas registradas desde el 4 hasta el 14 de diciembre, fecha en la que la Fiscalía obtuvo los equipos móviles.
Para la Fiscalía, la conducta de los dos hermanos para ocultar la información fue de manera deliberada y consciente.
La Fiscalía citó la diligencia judicial al considerar que existen pruebas suficientes para procesar a los hermanos de Rafael Uribe Noguera por el delito de destrucción, supresión u ocultamiento de elemento material probatorio.
También se les acusa de no llamar al Gaula apenas encontraron a su hermano, aun cuando sabían que las autoridades lo estaban buscando a él y al vehículo en el que había raptado a la niña.