–Más de una tonelada y media de base de cocaína y cien kilos de clorhidrato de cocaína fueron incautadas por la Armada Nacional en la costa Pacífica colombiana, en el departamento de Nariño, zona limitrofe con Ecuador. Con este, son ya cerca de 4 toneladas de la droga decomisadas por la institución en menos de 48 horas en esa región del suroccidente del país.

El último cargamento estaba escondido en una zona selvática de la vereda Guabal, en jurisdicción del municipio de Olaya Herrera Satinga.

Allí, el personal de la Armada Nacional logró ubicar, en medio de una zona de manglar, 39 bultos que habían sido escondidos cuidadosamente y que, al parecer, contenían clorhidrato de cocaína y base de cocaína.

El material hallado por el personal de la Armada Nacional, adscrito al Batallón de Infantería de Marina No 40, fue recuperado y transportado inmediatamente hasta el casco urbano del municipio de Tumaco para adelantar el proceso judicial correspondiente.

En el lugar, funcionarios de Policía Judicial le realizaron la Prueba Inicial Preliminar Homologada PIPH a la sustancia hallada al interior de los bultos, la cual dio positivo para clorhidrato de cocaína y base de cocaína, respectivamente.

La droga incautada durante esta operación militar alcanzó un peso neto de 100 kilogramos de clorhidrato de cocaína y 1.686 kilogramos de base de cocaína.

De este alijo, el cual fue puesto a disposición de las autoridades judiciales en el municipio de Tumaco, se presume que la cocaína estaría siendo acopiada para ser enviada a Centroamérica y Estados Unidos; mientras que la base de cocaína sería utilizada en algún cristalizadero de la región donde, después del respectivo proceso químico, sus propietarios podrían haber obtenido hasta 1.686 kilogramos de clorhidrato de cocaína.

Con los duros golpes propinados por la Armada Nacional durante los últimos dos días en el Pacífico Sur, la institución naval ha impedido que ingresen más de 68 millones de dólares a las arcas de los grupos armados y delincuenciales organizados, que pretenden utilizar esta región de Colombia como plataforma para desarrollar sus actividades ilegales, asociadas al narcotráfico. Además de evitar que llegaran más de 138.300 dosis de droga a las manos de los consumidores locales.