Los Emiratos Árabes Unidos pidieron este viernes a Catar que se tome “en serio” las peticiones de sus vecinos, entre ellas una reducción de sus relaciones con Irán y el cierre de la cadena Al Jazeera, para acabar con la crisis del Golfo.
El ministro emiratí de Relaciones Exteriores, Anwar Gargash, lanzó esa advertencia en Twitter, después de que varios medios de comunicación anunciaran que Kuwait, mediador entre Catar y sus adversarios, entregó a Doha una lista de 13 peticiones formuladas por éstos últimos para poner fin a la crisis diplomática iniciada el 5 de junio.
Según esos medios, Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Egipto exigen, entre otras cosas, que Catar reduzca sus relaciones con Irán -gran rival regional de Riad- y cierre el canal de televisión Al Jazeera y una base militar turca en su territorio. Doha tiene un plazo de 10 días para cumplir esas peticiones, añadieron.
Por el momento no ha habido ninguna confirmación oficial sobre esa lista.
Los cuatro rivales de Catar también reclaman que Doha rompa sus vínculos con movimientos extremistas, entre ellos la cofradía de los Hermanos Musulmanes, el grupo Estado Islámico (EI), Al Qaida y el Hezbolá chiita libanés, según una versión de esa lista que circula en las redes sociales.
Los países que rompieron sus relaciones diplomáticas con Catar piden asimismo que Doha extradite a los opositores de los cuatro países en su poder y que cierre, además de Al Jazeera, cuya línea editorial consideran demasiado cercana a los islamistas, las páginas de noticias Arabi21, Rassd, Al Arabi al Jadid y Middle East Eye, según esa misma versión.
El ministro emiratí acusó a Catar de haber “filtrado” esa lista, añadiendo que Doha “intenta hacer fracasar la mediación” llevada a cabo por Kuwait.