Los colombianos cuentan con un novedoso medicamento para el tratamiento de la insuficiencia cardíaca, una enfermedad que afecta a más de 647.000 personas en el país. Esta opción terapéutica, que fue aprobada por el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA), logra avances significativos al reducir en un 20% el riesgo de muerte por esta enfermedad, en un 21% la tasa de primeras hospitalizaciones y un 16% el riesgo de mortalidad por cualquier otra causa.
Esta innovadora terapia prolonga y aumenta la calidad de vida de las personas que sufren de insuficiencia cardíaca; rápidamente alivia la sintomatología y algunos estudios demuestran mejoría en menos de 2 meses una vez iniciado el tratamiento, además de una reducción de hasta 38% en las re-hospitalizaciones.
De acuerdo con la Dra. Clara Saldarriaga, jefe del programa de cardiología de la Pontificia Universidad Bolivariana, “Luego de 20 años de investigación aparece una nueva esperanza para los pacientes con insuficiencia cardíaca que mejora rápidamente sus síntomas, y los ayuda a vivir más años con vidas más activas”.
Sobre la Insuficiencia Cardíaca
La Insuficiencia Cardíaca es una condición en donde el corazón no puede bombear la suficiente cantidad de sangre para suplir las necesidades del cuerpo. Generalmente empeora con el tiempo y lleva a la muerte, especialmente si no se instaura una terapia de manera temprana que pueda optimizar el funcionamiento cardiaco.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las Enfermedades Cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo. De hecho, la OMS estima que en 2012 produjeron la muerte de 17,5 millones de personas, lo cual representa un 31% de todas las muertes registradas en el mundo.
Todos los años, aproximadamente 89,6 millones de personas en Latinoamérica, – un 27,7% de la población adulta de la región- son diagnosticadas con cardiopatías. En Colombia uno de cada seis colombianos –alrededor de 5.6 millones de personas (17.1% de la población)- está afectado por una las siguientes condiciones cardíacas: hipertensión arterial, infarto al miocardio, fibrilación auricular (arritmia) o insuficiencia cardíaca.
El cuidado integral de las enfermedades cardiovasculares genera un impacto económico al país de $6,4 billones de pesos. De las cuatro enfermedades, el Infarto de Miocardio (MI) representó el mayor costo financiero con $3,4 billones de pesos; seguido de la Insuficiencia Cardíaca (HF) con $1,7 billones de pesos; la Hipertensión (HTA) con $764.200 millones de pesos y finalmente la Fibrilación Auricular (FA) con $578.800 millones de pesos6.
Entre los factores de riesgo más comunes de las enfermedades cardiovasculares se encuentran el historial familiar, el origen étnico y la edad. Sin embargo, hay otros factores de riesgo que se pueden corregir y tratar como lo son la exposición al tabaco, la alta presión sanguínea o hipertensión, el colesterol alto, el sobrepeso o la obesidad, la falta de actividad física, la diabetes, dietas no saludables y el consumo dañino de alcohol.