Internacional

EE.UU. dispara misil intercontinental en respuesta a nueva prueba de proyectil norcoreano

–Un misil balístico intercontinental lanzó exitosamente la Fuerza Aérea estadounidense desde la costa de California hacia un atolón del Pacífico, en tácita respuesta a la nueva prueba de un proyectuil de esa misma categoria por parte de Corea del Norte.

El misil corresponde a un Minuteman III sin ojiva nuclear y fue dirigido hacia un blanco simulado en un atolón del Océano Pacífico.

El coronel Michael Hough, comandante de la Fuerza Aérea estadounidense, a través de un comunicado dijo que el lanzamiento pretende “validar y verificar la efectividad, prontitud y exactitud del sistema de armas”, reseña RT.

Este es el cuarto lanzamiento de un proyectil Minuteman este año desde la base de Vandenberg, al noroeste de California. La primera prueba tuvo lugar en febrero, involucrando un misil con una ojiva no explosiva que se desplazó hacia las Islas Marshall. La siguiente prueba se realizó el 26 de abril y días después se lanzó un tercer misil desde esa base.

Corea del Norte lanzó el 28 de julio un proyectil de largo alcance categorizado por militares estadounidenses y surcoreanos como intercontinental.

El misil se desplazó 998 kilómetros antes de caer a 370 kilómetros de la costa de Japón.

La medida ha generado una amplia condena en la comunidad internacional, ya que el proyectil pudo haber atravesado rutas de aviones comerciales que volaban a través de la zona. Numerosos reportes de prensa apuntaron a que un vuelo de Air France, con 323 personas a bordo, pasó por la trayectoria del misil solo 10 minutos antes de que descendiera.

COREA DEL SUR

— Corea del Sur, Estados Unidos y Japón acordaron este miércoles que el desarrollo del misil balístico intercontinental (ICBM, según sus siglas en inglés) de Corea del Norte representa una “nueva fase” de amenaza de seguridad, según informa la agencia Yonhap.

En una videoconferencia entre funcionarios de Defensa de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón, las tres partes reafirmaron una determinación unida para aplicar la “máxima presión” sobre Pyongyang a fin de detener sus provocaciones y reanudar los diálogos de desnuclearización.

Las consultas a nivel de trabajo tuvieron lugar cuatro días después de que el Norte disparase el ICBM Hwasong-14 por segunda vez en el mes de julio.

Las tres partes “condenaron firmemente el lanzamiento norcoreano del ICBM como una clara y flagrante violación de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unides (CSNU)”, informó el Ministerio de Defensa.

Durante la reunión trilateral se destacó que el programa nuclear y de misiles de Corea del Norte “representa una nueva fase de amenaza que es grave y urgente contra la paz y seguridad del Nordeste Asiático y Estados Unidos”.

Asimismo, los funcionarios acordaron mantener una estrecha cooperación para implementar la máxima presión contra Pyongyang a fin de lograr la desnuclearización completa, verificable e irreversible de la península coreana.

Corea del Sur estuvo representada por el teniente general Jang Kyung-soo, viceministro en funciones de la oficina de planificación política del ministerio, mientras que sus homólogos fueron David F. Helvey, secretario adjunto interino de defensa para asuntos de seguridad de Asia y el Pacífico de Estados Unidos, y Satoshi Maeda, director general para políticas de defensa de Japón.

EE.UU. NO BUSCA CAMBIO DE REGIMEN NORCOREANO

— Estados Unidos no busca un cambio de régimen en Corea del Norte según ha dicho, el martes (hora local), el secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, mientras las tensiones se han incrementado por el programa nuclear y de misiles de Corea del Norte.

“No buscamos un cambio de régimen. No buscamos el colapso del régimen”, dijo Tillerson en una aparición sorpresa en la conferencia de prensa del Departamento de Estado. “No buscamos una reunificación apresurada de la península (coreana). No buscamos una excusa para enviar a nuestros soldados al norte del paralelo 38º”, añadió el secretario de Estado, refiriéndose al paralelo que divide la península coreana.

El Norte realizó, la semana pasada, su segundo ensayo de un misil balístico intercontinental, aumentando las preocupaciones de que el país comunista pueda estar cerca de atacar el territorio continental de Estados Unidos con un arma nuclear.

Pyongyang dijo que el ensayo tenía por fin entregar una “firme” advertencia a los Estados Unidos, que ha estado inclinado a utilizar sanciones y presión sobre el Norte y justifica con amenazas de guerra la voluntad del régimen para el desarrollo de armas nucleares.

El Norte afirma que los ejercicios militares regulares entre las tropas surcoreanas y estadounidenses son un ensayo para invadir el Norte. A fin de disuadir la agresión estadounidense, el país comunista insiste en el desarrollo de su programa nuclear y de misiles.

Tillerson dijo que una de las primeras amenazas a la que la Administración Donald Trump se tuvo que enfrentar fue la que representaba Corea del Norte.

El secretario dijo que la amenaza se ha materializado en la forma en que se estimaba y que ese es el motivo por el que la consideraban una cuestión muy urgente, además de que los norcoreanos demostraron que la urgencia es real.

Tras el lanzamiento de la semana pasada, el segundo tras el llevado a cabo el 4 de julio, Pyongyang ha afirmado que sus misiles pueden alcanzar todo el territorio continental estadounidense. Algunos especialistas en los Estados Unidos opinan que el Norte podría dominar la tecnología para lanzar un misil balístico con una ojiva nuclear para el próximo año como muy pronto.

Tillerson dijo que están tratando de transmitir a los norcoreanos que no son sus enemigos ni una amenaza contra ellos, pero que el régimen comunista representa una amenaza inaceptable y que, por lo tanto, deben responder.

Asimismo, Tillerson instó a China a tomar más medidas para refrenar a Pyongyang.

Sin embargo, el secretario señaló que Estados Unidos no culpa a China por el problema nuclear norcoreano y que Pyongyang “no define” la relación de Washington con Pekín. (Información Agencia Yonhap).