–Hacia las 11 de la mañana desde Quito, la capital de Ecuador, el gobierno colombiano y la guerrilla del Eln anunciarán un cese bilateral al fuego temporal con motivo de la visita del Papa Francisco a Colombia.

El acuerdo, que se dará en el marco de una rueda de prensa que se cumplirá en la sede de la cancillería ecuatoriana, se prolongará por dos meses e incluye la suspensión de hostilidades, esto es, la práctica de secuestros y las acciones terroristas, hechos a los cuales se había negado sistematicamente el reducto guerrillero.

La Iglesia Católica se encargará de verificar el cumplimiento del acuerdo en el marco de una comisión veedora que, al mismo tiempo, se encargará de adelantar una labor de alerta y prevención.

El pacto, el primero que se concreta con el Eln, cierra este lunes el tercer ciclo de negociaciones de paz con el gobierno colombiano.

En un escrito en la página web, el grupo guerrillero destaca que la visita del Papa Francisco es un hecho trascendental para este momento que vive el país y añade que «su sola presencia traerá esperanzas, su aliento nos dará coraje, la memoria nos predispondrá a todos a honrar a las víctimas y encontrar una salida política al conflicto para construir un país con Justicia Social».

Igualmente señala: «La visita de Francisco a Colombia es una oportunidad para reafirmar las esperanzas de reconciliación. Para ello, todos los colombianos debemos asumir nuestras responsabilidades y muestro compromiso para que hechos semejantes no vuelvan a ocurrir. “Verdad toda, verdad todos” es un principio que debe guiar las esperanzas de paz y de reparación de las víctimas. Asumimos ese compromiso».

También afirma: «Pasados los días de celebración que acompañen la presencia de Francisco en Colombia, seguiremos empeñados avanzar hacia el desescalamiento del conflicto, hasta que la Paz Completa sea una realidad».

En el escrito el Eln hace referencia a la beatificación de monseñor Jesús Jaramillo Monsalve asesinado por elementos del mismo grupo guerrillero.

Sin embargo insiste en precisar que «no avaló la decisión de haber causado su muerte».

«Aun así–agrega–, siendo que ésta fue llevada a cabo por integrantes de esta organización, nos corresponde la responsabilidad histórica de reconocer el hecho. En el marco de la visita de Su Santidad estamos dispuestos a pedir perdón por ello».