La plenaria del Concejo de Bogotá, en segundo debate, votó el Proyecto de Acuerdo autoría del concejal Marco Fidel Ramírez, llamado «Más mujeres sentadas, más mujeres protegidas» el cual tuvo un empate de 12 votos por el sí y 12 por el no.

Ramírez justificó el proyecto afirmando que «al haber una competencia por una silla se presentan agresiones hacia la mujer y se facilitan los manoseos y abusos, la iniciativa es una acción afirmativa en protección de las mujeres, en el que se busca mayor seguridad para ellas, una acción estratégica con enfoque de cultura ciudadana para que se genere un cambio cultural, mediante el establecimiento de esa nueva masculinidad respetuosa por la mujer y en el que habrá un impacto inmediato de ser aprobado”.

El cabildante vocero del Partido Opción Ciudadana, precisó que el Acuerdo beneficia directamente a las usuarias de TransMilenio con el uso preferencial de las sillas rojas en horas pico.

El cabildante concluyó que su iniciativa no implica que se dejen a un lado las campañas pedagógicas. “Se deben combinar la educación, la cultura ciudadana y medidas como la que propongo, porque cuánto tiempo llevamos llamando la atención por los que en Transmilenio roban o hacen tocamientos a las mujeres”.

Los concejales Diego Devia y Rubén Darío Torrado, ponentes del Proyecto, indicaron que esta iniciativa es una forma de reacción de la ciudadanía en una democracia representativa ante la falta de seguridad y falta de presencia policial en los buses del sistema Transmilenio, y que lo que pretende es promover la cultura ciudadana para contrarrestar el problema del acoso y el hurto en el transporte público y poder hacer parte de la solución, sustentaron su ponencia positiva, indicando que ninguna de las administraciones ha logrado sacar una política de protección a las mujeres o de la agresión sexual en el transporte público y que no se busca acciones aisladas sino una política integral en protección de la mujer y que las acciones afirmativas de ceder la silla a mujeres, “lo que busca es reivindicar los derechos de grupos que han sido históricamente violentados”.

La Administración sostuvo que no se debe propiciar la segregación, sino hacer un ejercicio fuerte de cambio cultural que fortalezca la coordinación intersectorial requerida para la protección del derecho de las mujeres a una vida libre de violencias.

Los concejales que están a favor consideran que si una mujer en el TransMilenio es víctima de acoso pero si tiene la oportunidad de sentarse, eso ayuda a controvertir y minimizar la problemática y los que están en contra señalan que se deben hacer campañas de cultura ciudadana por el respeto hacia las mujeres y que el Proyecto no soluciona los problemas de agresión, que lo único que soluciona el tema es cuando se mejora la calidad del servicio y la infraestructura, puntualizaron estar de acuerdo con la defensa de la equidad de género sí, pero no con medidas segregacionistas.