En el parque principal del municipio de Andes (Antioquia), Érika María Taborda, de 38 años de edad, departía con unos amigos y habría sido atacada por su excompañero sentimental. Las heridas recibidas con arma blanca le causaron la muerte instantánea.
El reciente 9 de enero, la Policía Nacional capturó a Wilson Sánchez Osorio, de 48 años, quien se allanó a los cargos que le imputó la Fiscalía General de la Nación por el delito de feminicidio. El Juzgado Segundo Promiscuo Municipal de Andes impuso al señalado agresor medida de aseguramiento en centro carcelario.
Los investigadores establecieron que semanas antes del crimen, Sánchez Osorio sufrió lesiones que le causaron discapacidad permanente en una de sus extremidades superiores, durante una riña protagonizada, al parecer, por los celos.