Alberto Brunori, Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas en Colombia, señaló que la propagación de ataques contra personas que ejercen la defensa de Derechos Humanos, es un síntoma grave del estado de cosas en Colombia.

Brunori también indicó a través de un comunicado que los recientes asesinatos tanto de líderes como de defensores de Derechos Humanos en el país, son una muestra de la intolerancia, provoca miedo, limita o anula las libertades de pensamiento y de expresión, y, lo que es peor, exhibe cómo la violencia se impone, en muchos lugares, como un medio de control social.

El funcionario del organismo internacional pidió el esclarecimiento de estos asesinatos, y dijo que la impunidad que ronda estos ataques agrava la situación, porque ante la ausencia de una sanción oficial, el reproche social disminuye y la violencia encuentra una justificación.

En Colombia, el Estado anunció la implementación de nuevos esquemas colectivos de protección ante el aumento considerable de los homicidios de los voceros comunales, que según cifras, este año se han confirmado 73 casos violentos.

Ayer sábado, el Gobierno Nacional anunció una evaluación de la situación de seguridad de los líderes sociales en el país, luego de los últimos asesinatos de personas que han asumido labores en la defensa de los Derechos Humanos en varias regiones de Colombia.

En ese sentido, el ministro del Interior, Guillermo Rivera, señaló que: “el próximo martes se va a reunir la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad, para evaluar las diferentes medidas de protección que se han venido adelantando y para hacer los ajustes que se requieran, de tal manera que se pueda brindar una mejor protección y una eficaz protección a los líderes sociales”.

Y agregó que aunque el Gobierno recibe las cifras de Naciones Unidas en materia de líderes asesinados, todavía se verifican las denuncias acerca de un número mayor de muertes violentas.

Y destaca Rivera que: “Hasta este momento verificados hay 33 líderes asesinados en lo que va corrido de este año y hay otros asesinatos cuyo liderazgo social está en proceso de verificación”.

El presidente Santos exigió a la Fuerza Pública mayor contundencia en protección de los líderes sociales y defensores de Derechos Humanos, con el objeto de evitar asesinatos especialmente en regiones como Cauca, Nariño y Antioquia.