La Sala Penal de ese alto tribunal intervino en el mes de abril de este año un teléfono celular del senador y expresidente, Álvaro Uribe Vélez, dentro de la investigación que abrió la Corte Suprema de Justicia contra el representante liberal Nilton Córdoba.
El mismo Uribe publicó hoy en su cuenta en Twitter que: “Hablé con un parlamentario con quien no tengo contacto. Lo hice porque me escribió y quería apoyar a nuestro candidato Presidencial, sobre el parlamentario hay una investigación y entonces me empezaron a interceptar como que yo fuera el parlamentario”.
Al parecer y según fuentes de la Corte, se ordenó la interceptación de los números de contacto del representante liberal Nilton Córdoba, pues se estaba indagando sobre una aparente participación suya en el Cartel de la Toga.
Así las cosas se intervinieron dos números tomados de los informes secretariales y de la información del expediente acerca de una presunta apropiación de recursos por parte de Córdoba, que estaba en el despacho de Gustavo Malo.
Después de dos semanas de seguimiento se le informó al magistrado investigador que uno de los celulares era realmente del expresidente Uribe Vélez, por lo que de manera inmediata se ordenó la cancelación de las interceptaciones.
Lo cierto es que no se conocen las razones por las que el teléfono de Uribe Vélez aparecía en los datos del representante liberal.
El expresidente fue notificado tras un derecho de petición que envió, que dice: “Aquí es preciso resaltar que el informe referido ni siquiera se especificó la identidad de la persona que empleaba la línea interceptada, en la medida que no resultaba pertinente ni relevante en tal actuación”.
Y agregó que: “de esta manera, la interceptación del abonado celular obedeció a un hallazgo imprevisto e inevitable”.
La Corte Suprema habría hecho este reconocimiento del hecho a través de una notificación enviada al expresidente el pasado 10 de septiembre.