Más de 31 millones de personas padecen diabetes en Sur América, de esta, al menos 4 millones son colombianas, de las cuales la mitad desconoce que tiene la enfermedad. Lamentablemente, al ser diagnosticada y no saber llevarse adecuadamente puede convertirse en un drama familiar.
La diabetes es un problema mundial, que de no manejarse adecuadamente puede incapacitar o acabar con la vida de quien la padece. De acuerdo con la OMS, la mortalidad por diabetes en Colombia es de 1220 en hombres y 1450 en mujeres, con edades que oscilan entre los 30 y 69 años.
Generalmente, la diabetes afecta a las personas en su edad más productiva, empobreciendo y reduciendo su esperanza de vida. Por esta razón, cuando una persona padece la enfermedad, el apoyo de la familia es fundamental para el acompañamiento de las citas con especialistas, toma de exámenes de laboratorio y para que aprendan a desenvolverse correctamente en el caso de una crisis, que por lo general corresponde a enfermedades asociadas como: la insuficiencia renal, enfermedades cardiovasculares, retinopatía, osteoporosis, entre otras.
Pero antes de ver esta enfermedad como un drama familiar, es importante cambiar de perspectiva y encontrar en esta situación una oportunidad para que toda la familia cambie su estilo de vida: mejorando sus hábitos, haciendo ejercicio y cuidando de su salud, así lo indica la Dra. Liliana Carvajal, Psicóloga de la Asociación Colombiana de Diabetes (ACD).
La especialista sostiene que el diagnóstico temprano, la prevención y los tratamientos, en el caso de encontrarse con diabetes son más fáciles de llevar al involucrar en todo el proceso a las familias.
De acuerdo con María Mercedes Otálora, directora Administrativa de la ACD, la Asociación cuenta con un equipo de profesionales idóneo que desde la rama de la salud en la que son especialistas orienta a todos los miembros del hogar en el manejo que se debe dar a la diabetes en el entorno familiar; además de los talles educativos que son un gran complemento a la hora de aprender de la diabetes.
Es por esto que en busca de la armonía y la comunión familiar, la Asociación prepara para el próximo 24 de noviembre el gran Festival de la Familia, en el que: “integrados con nuestra misión buscamos que la persona con diabetes y su entorno sean alegres, formadas y capaces de enfrentar este reto en familia”, explica Otálora.
Agrega además que en este festival las familias pueden disfrutar de un tiempo de esparcimiento haciendo ejercicios, participando de conversatorios, cocinando, escuchando música y aprendiendo a vivir con “la señora diabetes”.
Y si de prevención y educación con respecto a la enfermedad se trata; los días 2 y 3 de noviembre se llevará a cabo el “Segundo Simposio Internacional de Prevención, Detección y manejo temprano de la Diabetes Mellitus y sus complicaciones”, evento que tendrá lugar en el Hotel Dan Carlton, al que asistirán conferencistas internacionales liderados por el Dr. Pablo Aschner, científico y experto en el manejo de la diabetes.
“Personal de la Salud, médicos y especialistas podrán seguir aprendiendo para aportar mayores beneficios en la atención de sus pacientes”, afirma Otálora.
¿Y qué hacer en familia?
Teniendo en cuenta que la diabetes genera cambios importantes y difíciles de alcanzar, la Asociación Colombiana de Diabetes hace las siguientes sugerencias:
-Comer en familia y consumir los mismos alimentos que la persona que padece de diabetes. Es muy frustrante que la persona con la enfermedad sienta que tiene una dieta especial.
-Evitar comprar para la casa alimentos que la persona con diabetes no puede consumir.
-Entre los cambios alimenticios, se aconseja que la familia siga una dieta saludable con alimentos bajos en grasa y consumir frutas y verduras frescas, carnes magras y mucho pescado.
-Salgan a hacer ejercicio, al menos 20 o 30 minutos al día.
-En lo que a la ingesta de medicamentos, pueden ordenarlos según el horario: mañana, tarde y noche y mantenerlos a la vista. Es útil anotaren un diario cada dosis para evitar olvidos.
-Use pastilleros o cajitas organizadoras para las dosis diarias, especialmente si se sale de casa.
Cifras de la diabetes en Colombia
Aunque no hay estadísticas publicadas, la Asociación Colombiana de Diabetes, estima que el 7% de la población de Colombia tiene diabetes; es decir, 4 millones de persona, y de éstos la mitad no lo sabe. La psicóloga Liliana Carvajal, anota que la diabetes es una enfermedad crónica en la que el cuerpo no puede regular la cantidad de azúcar en la sangre. La más común es la diabetes tipo dos, que por lo general se presenta en la
edad adulta, relacionada, generalmente por las altas tasas de obesidad.
De acuerdo con estadísticas de la Asociación Colombiana de Diabetes, al año llegan en promedio 1100 adultos y entre 55 a 60 menores de edad, de los cuales 48% son Hombres, 46% Mujeres y 7% niños; pertenecientes a un estrato socioeconómico 3.
“Estos datos se basan en un 66% de personas con diabetes que residen en Bogotá y un 34% que llegan de otras ciudades del país. La mayoría de las personas que llegan a la Asociación vienen con diagnóstico de diabetes de larga data en un promedio de 83% y personas adultas con diagnóstico reciente inferior a un año, un 17%”, sostiene María Mercedes Otàlora, directora administrativa de la entidad.
De acuerdo con el atlas de la Diabetes, ningún país es inmune a esta enfermedad.
“La carga de diabetes drena los presupuestos sanitarios nacionales, reduce la productividad, frena el crecimiento económico, genera gastos muy altos en hogares vulnerables y sobrecarga los sistemas sanitarios”. Es considerada una de las mayores emergencias sanitarias mundiales del Siglo XX, ya que esta entre las 10 principales causas de muerte a nivel mundial y representa más del 80 % de todas las muertes prematuras de enfermedades no transmisibles.
La diabetes prevalece en el 7.6% de los hombres y el 8.5% en mujeres y los principales factores de riesgo son el sobrepeso (53.2%hombres y 58.3% mujeres), la obesidad (15.7%hombres y 25.5%mujeres) y la inactividad física (53.4% hombres y 72.9% mujeres).
Así que para salvar vidas y prevenir o retrasar las complicaciones relacionadas con la enfermedad, es clave cambiar a un estilo de vida saludable con toda la población, además de fomentar la detección, el diagnóstico y un tratamiento integral; es decir, en el que el paciente sea visto por todos los profesionales de la salud relacionados con este padecimiento, desde el endocrinólogo, pasando por el nutricionista hasta el psicólogo.