La relación entre las apropiaciones que aprobó el Congreso el pasado mes de octubre en la Ley de Presupuesto del 2018 y las obligaciones confirmadas a julio de este año muestran cifras favorables desde el punto de vista de la ejecución, aseguró este miércoles el ministro de Hacienda y Crédito Público, Alberto Carrasquilla Barrera.
El funcionario, que asistió a un debate en la comisión IV del Senado de la República, explicó que, a julio de 2018, la relación entre lo aprobado en el Presupuesto y las obligaciones (es decir, aquellos recursos frente a los cuales media un contrato o una resolución de gasto) es del 49,6%, sin contar el servicio de la deuda, y sube aún más si se tiene en cuenta un decreto de aplazamiento aprobado a comienzos de este año.
El ministro Carrasquilla Barrera recordó que, en abril de este año, el gobierno anterior decretó el aplazamiento de apropiaciones en el Presupuesto General de la Nación por un total de $2 billones. De acuerdo con ese aplazamiento, la relación entre las obligaciones y los recursos apropiados es del 50,1%.
Ambas cifras están por encima del 45,3%, que es el porcentaje de los últimos 15 años (entre 2002 y 2017), y del 48,8%, que el dato a julio de 2017.
“Me parece que el mensaje de fondo es que, en el 2018, la relación entre los recursos respaldados en obligaciones respecto a las apropiaciones que se aprueban en el Congreso cada mes de octubre arroja un dato favorable, es una noticia buena desde el punto de vista de la ejecución”, aseguró Carrasquilla Barrera.
Ante las preguntas de los senadores, el ministro recordó que, desde los años 90, en Colombia hay una destinación específica para la educación superior de acuerdo con la llamada Ley 30, que dispone que los recursos para las universidades públicas deben crecer cada año por encima de la inflación, los cuales, para el año 2019 serán de $3,3 billones.
“No son suficientes”, reconoció el titular de la cartera de Hacienda, por lo cual el Gobierno aportará, adicionalmente, alrededor de $440 mil millones adicionales, especialmente para financiar los gastos pensionales.
En relación con la salud, Carrasquilla Barrera insistió en que es necesario tener en cuenta que el sistema invierte más en atención de lo que recolecta por el pago de las primas, en un porcentaje que va de 25%, en los cálculos más bajos, a un 200% en los más altos; es decir, que por cada peso que pagan los usuarios, el sistema estaría invirtiendo 2 en atención, de los cuales un gran porcentaje es pagado por el Estado vía tutelas.
“El problema que tenemos es la enorme deuda que se ha acumulado en cabeza del Estado para con las aseguradoras y de estas con los prestadores de servicios, incluyendo hospitales, laboratorios, centros de diagnóstico y, en general, todas las IPS del país, y por eso el sistema está entrando en corto circuito”, concluyó el ministro Carrasquilla Barrera.