Por: Luis Eduardo Forero Medina
El pasado 1º de septiembre el gobierno nacional anunció en Socorro (Santander) la creación de un plan piloto de turismo de aventura; por lo que el tour del último trimestre del año empieza a 40 minutos de Bogotá en el ecoparque Tygüa Magüe, en la vereda Lourdes en Tabio, donde se practica senderismo, safaris fotográficos, reconocimiento e investigación de flora y fauna nativa, observación de estrellas, tratamientos terapéuticos, realización de ceremonias ancestrales, eventos de bienestar empresarial; en fin conciertos de música espiritual, y la observación de más de 352 especies de plantas y 50 clases de aves.
Si lo que prefiere es la montaña, tiene 5 senderos y 25 estaciones para observarla, respirar y meditar en el Laberinto de Rocas Fósiles.
Tygüa Magüe, es “el escenario perfecto para re-encontrarse con usted mismo, para sacarle tiempo a la única persona que suele no estar nunca y que irónicamente es usted mismo. …”, dijo Chamalú, un “hombre de sabiduría que une lo ancestral con lo contemporáneo, lo sagrado con lo mundano”. La siguiente etapa es en Villavicencio en el Centro Mundial de Coleo, arte que consiste en alcanzar al novillo o toro que se aparta de la manada. Halándolo por la cola, el vaquero derriba al animal haciéndolo girar sobre su lomo.
Próxima parada: Florencia, Caquetá; donde se lleva a cabo en noviembre el Festival Internacional de las Artes “Minga”. Minga significa ‘reunión´, y se llevan a cabo actividades bodypaint, cine, circo, cuentería, danza, foros y talleres de música, magia, teatro, títeres, pintura, y performance. En esta ciudad en diciembre igualmente se lleva a cabo el Festival Nacional de Música Andina y Campesina Colono de Oro, desde hace 33 años. En su versión departamental, se presentan al Concurso solistas, duetos, tríos, grupos instrumentales, grupos vocales mixtos y solistas instrumentales, interpretando música andina colombiana. Es todo una competencia de improvisación de coplas al son de música llanera.
Siguiente estación: Cuadrillas de San Martín (Meta), que son cada 11 de noviembre desde 1735, donde a los espectadores les espera diez acrobacias realizadas a caballo, integrados en cuatro “cuadrillas”, (Galanes, Moros, Guahibos y Cachaceros); que entre diversos “juegos o figuras” hacen las veces de los enfrentamientos que en el pasado hubo entre indios, españoles, negros y moros.
El 25 y 26 de noviembre el destino es Villa del Rosario, corregimiento de Juan Frío , (norte de Santander), para degustar el Festival de la Cachama, con el apoyo de la Unidad para las Víctimas, dentro del proceso de reparación colectiva. El plato recomendado es Cachama borracha –cachama frita y gratinada.
En diciembre el viaje es a Villa de Leyva (Boyacá), al festival de Luces en las noches del 7 y 8 de diciembre, que deleita a miles de personas, que admiran en vivo el resultado de meses de trabajo de los mejores polvoreros de la región. Las calles de la villa se inundan no de agua; de luces, velas, globos, banderas, tiras de papel de azul de variados tonos. Igual los balcones y terrazas de las casas.
En diciembre, en Plato (Magdalena) el Festival del Hombre Caimán’, ofrece concurso de acordeoneros aficionados, de canción inédita, canción infantil, y juvenil. La leyenda se resume en “ese hombre enamorado, lleno de poesía, que se convirtió en hombre caimán debido a una pócima traída desde la Guajira”.
Las coordenadas ubican a Guapi (Cauca), a las Balsadas en el río Guapi, desde donde se disparan fuegos artificiales; convirtiéndolas en noches mágicas, rodeadas de balsas y canoas adornadas con luces. Enseguida, la hoja de ruta turística contempla la llegada a Corrales, municipio boyacense, a cuarenta minutos de Sogamoso. Su alumbrado navideño, uno de los más esplendorosos de Boyacá, ha ganado varios concursos departamentales de alumbrados.
Para el siguiente evento la conexión es fácil, encaminarse a mediados de diciembre a Yopal (Casanare), donde se celebra ‘El Cimarrón de Oro’, evento Folclórico y musical que cumple en 2019 tres décadas; tiempo en el cual los asistentes son embelesados por expertos exponentes del contrapunteo y voz recia, de ambos géneros. Decenas de copleros de los llanos colombo-venezolanos se toman durante dos días el programa.
El 16 de diciembre continúa el tour de fin de año en Tunja (Boyacá) cuando empieza el Aguinaldo Boyacense que cumple 63 años; y ostenta su inclusión en el preciado patrimonio cultural de Colombia. En el aguinaldo hay de todo, exposiciones culturales y eventos musicales, desfiles de carrozas, espectáculos de artistas, verbenas populares y eventos deportivos.
Para esta misma época la brújula indica que del 23 al 29 de diciembre estamos de vuelta en uno de los mejores anfitriones, Sampués en Sucre, Capital Mundial del Sombrero Vueltiao; a asistir al Festival de donde sale electa la embajadora del gremio de la caña flecha y las artesanías ante el país y el mundo. La ganadora también es la representante de Colombia en el concurso Miss América Latina. De allí nos dirigimos para Cúcuta, haciendo conexión el 29 de diciembre, cuando empieza el Desfile de los Genitores en Ocaña, que consiste en un espectáculo que combina elementos teatrales y musicales para recrear la historia de la ciudad.
Ultima parada: Feria de Cali. La salsa y la alegría se vive en la sultana del Valle del 25 al 30 de diciembre en la versión 60. La autopista suroriental en un trayecto de kilómetro y medio, se convierte en una rampla en la que el público disfruta de coreografías macondianas y música en vivo con tres orquestas en escena. Al día siguiente la misma arteria vial recibe más de dos decenas de vehículos matriculados entre 1920 y 1970, en perfecto estado. El 28 de diciembre saldrán Jovita, La Llorona, la Madre Selva, el Loco Guerra, Riverita y los Gigantes de la Feria. Los Encuentros de Melómanos y coleccionistas de música afrocaribeña se dan un día antes de terminar el evento que se remonta a 1957, cuando nació con el nombre de Feria de la Caña. La mayoría de la programación no tiene costo. !Bienvenidos todos!
@luforero4