Así lo determinó este miércoles un juez penal del circuito de Funza, tras confirmar que las pruebas recogidas por los miembros de la Fiscalía en la finca de de Jorge Pizano en Subachoque, Cundinamarca, son ilegales, confirmando así la decisión emitida por un juez de control de garantias del municipio del Rosal.

Según el proceso, dichas pruebas fueron recaudadas para adelantar las investigaciones de muerte y la de su hijo, Alejandro Pizano, quien resultó muerto después de ingerir agua saborizada de una botella que contenía cianuro.

El hecho es que las pruebas fueron recaudadas entre los días 17 y 18 de noviembre y cinco días después se hizo la audiencia de legalización de pruebas, cuando la ley establece que esta se efectúe en menos 36 horas.

La Fiscalia General de la Nación manifestó que el procedimiento no incluyó un allanamiento sino una inspección avalada por la misma familia de Jorge Pizano, quien se desempeñaba como controller de la Ruta del Sol II, y no era necesario presentarlas ante un juez; ese argumento no convenció en segunda instancia y de ahí la decisión que se conoció hoy.

Para el juez, la Fiscalía habría violado la privacidad de la familia de Jorge Pizano, porque si bien solo se autorizo llevar un celular, se llevó una tablet, un disco duro y el tarro con cianuro.

Como consecuencia de este irregular procedimiento, estas no podrán ser utilizadas para las investigaciones pertinentes.