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The Smiling Lombana: Secretos compartidos que rompen tabúes

Foto The Smiling Lombana
The Smiling Lombana entra a su segunda semana en cines. En Bogotá estará en las salas de Andino, Avenida Chile, Calle 100, Cinemanía y Tonalá. También se proyecta en Medellín, Cali y Barranquilla.

Tito Lombana, o The Smiling Lombana, como llamaron las autoridades estadounidense en sus investigaciones al prometedor artista, autor de la obra los Zapatos Viejos de Cartagena y protagonista del segundo largometraje documental de la directora Daniela Abad Lombana.

Desde que estrenó el documental en el Festival de Cine de Cartagena hace casi un año y más ahora que está en las salas de cine, Daniela ha insistido en que lo que busca es generar una conversación honesta “me gusta contar mis secretos, pues solo así el otro me dirá los suyos y juntos entenderemos que al final no son tan importantes, que lo que importa es la discusión, el diálogo, la confrontación”.

Y eso fue precisamente lo que logró la película @smilinglombana en twitter a través del hashtag #MiSecretoFamiliarEs… donde más de nueve mil personas se sumaron a esta tendencia, entre ellas reconocidas personalidades como Daniel Coronell, Isabel Salazar, Daniel Samper, Cony Camelo, Andrés Ospina, Gustavo Gómez, Martín Santos, Vanessa De La Torre, Carlos Francisco y Juan Manuel Galán, entre muchos otros.

En las confesiones hay de todo, desde episodios muy tristes, hasta otros muy graciosos, pasando por los anecdóticos como el de @elBogotazo: “Mis padres se fugaron a Venezuela para casarse, sin que mis abuelos maternos supieran. Mi mamá estaba a un día de irse a estudiar becada a la Unión Soviética, con la maleta lista. Mi padre la disuadió, huyeron y el matrimonio duró tres meses”.

Definitivamente parece tener razón la directora Daniela Abad cuando asegura que contar lo que nos avergüenza es bueno para todos. “En el caso de The Smiling Lombana pensé que contando lo que le avergonzaba a mi familia, podría alivianar el peso de muchas familias más y generar un diálogo que considero fundamental. Más que juzgar a las personas que esconden sus “manchas”, quería que ellas también lograran contarlas y así poder tener una discusión que considero necesita Colombia desde hace muchos años”.