Artesanías de Colombia junto a USAID y ACDI/VOCA buscan rescatar el tejido de memoria histórica
La artesanía es una meditación. En cada pieza se plasma el pensamiento de un pueblo, las creencias de una comunidad. Es una actividad pacífica por medio de la cual se construye la memoria y se incentivan nuevas narrativas que abren paso a la reconciliación.
Los artesanos, héroes silenciosos y resilientes, han insistido en sus oficios a pesar de la dificultad. Gracias a ellos sobreviven y aportan a la generación de ingresos de sus comunidades, a la vez que salvaguardan el patrimonio material e inmaterial de los colombianos.
Arcenio Ortiz nació en el Litoral de San Juan, Chocó, en el resguardo Papayo. Tiene 36 años y hace 14 vive en Ciudad Bolívar, en Bogotá. Llegó huyendo de la guerrilla sin tener claro cómo iba a sobrevivir en la capital. Sin hablar español trabajó en un restaurante, fue obrero y, finalmente, hace unos años, al ver la necesidad de su comunidad, comenzó a trabajar con los Wounaan de Vista Hermosa, en Ciudad Bolívar, y se convirtió en artesano líder del comité de mujeres.
Para Arcenio, los canastos de werregue que elabora lo hacen identificarse como Wounaan. No solo se han convertido en el sustento de 25 mujeres artesanas de Vista Hermosa que trabajan con él, sino que le han permitido preservar su cultura, lengua, historia y simbología, aun estando lejos de su territorio. Es a través de sus creaciones que enseña a los más jóvenes sobre sus ancestros y se mantiene una conexión con el origen.
Esta es una de muchas historias que animaron a Artesanías de Colombia a participar en la convocatoria que realize el Programa de Alianzas para la Reconciliación de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y ACDI/VOCA para promover “alianzas transformadoras orientadas hacia la generación de oportunidades económicas y sociales enfocadas al reconocimiento del pasado como instrumento movilizador, el cambio desde el ser (abordaje psicoemocional) y la inclusión de los diferentes segmentos poblacionales más vulnerables”.
Con el proyecto ‘La artesanía, un dispositivo cultural y productivo para la reconstrucción de la memoria colectiva y la reconciliación de las comunidades de los Municipios de Ciénaga (Magdalena) y Bogotá’, Artesanías de Colombia fue seleccionada entre 200 propuestas.
Se priorizó la atención a dos comunidades artesanas afectadas directamente por el conflicto armado donde la vulnerabilidad social y económica fuera evidente y que, a la vez contaran con una fortaleza cultural y simbólica: la de Ciénaga, Magdalena y la Wounaan, asentada en Ciudad Bolívar, en Bogotá. En total serán 64 artesanos (32 Wounaan y 32 de Ciénaga) beneficiados por este proyecto que busca aportar a la construcción de la memoria histórica colectiva y a la reconciliación de estas comunidades.
El proyecto está programado para ser ejecutado en 6 meses y busca fortalecer a los artesanos en su desarrollo humano, emprendimiento, diseño, calidad, producción, promoción y comercialización. El marco metodológico se basa en el enfoque reconciliador “DECIDO SER”, del programa PAR que destaca cuatro pilares o elementos clave que son: confianza, respeto, empoderamiento y diálogo. Estos “drivers” facilitan la comunicación, las relaciones de confianza de una comunidad, construyen relaciones ejemplarizantes, llaman a la acción a los individuos, y promueven alianzas transformadoras.