La Administración Distrital decidió reducir el límite de velocidad máxima a 50 km/h a la Avenida Primero de Mayo y la Avenida NQS. La medida se implementará en un mes y habrá un periodo de comparendos pedagógicos de dos semanas.
La medida se tomó con la intención de reducir el índice de fatalidades de estas dos avenidas, las cuales se encuentran entre los cinco corredores principales con mayor número de muertes por accidentes de tránsito,
Solo en 2018 en estas dos vías se concentró el 13% de las víctimas mortales por incidentes de tráfico en Bogotá, con 12 fatalidades en la Avenida Primero de Mayo (4%) y 46 en la Avenida NQS (9%). El balance de 2019 para estos dos corredores se mantiene en niveles similares, con una participación del 14% en el número de víctimas mortales por tránsito al 28 de febrero de 2019 en Bogotá, con 8 fatalidades. De estos balances, se estima que el 85% de las víctimas fueron actores vulnerables.
La reducción de los límites de velocidad máxima en corredores principales forma parte del Programa de Gestión de la Velocidad de la Secretaría Distrital de Movilidad y ha demostrado ser una medida efectiva para reducir las muertes en el tránsito en Bogotá. Desde que el Distrito estableció el límite de velocidad máxima a 50 km/h en cinco corredores principales en octubre pasado, se han logrado reducir las fatalidades en un 37% en la Avenida Boyacá, Avenida Carrera 68, Avenida Ciudad de Cali, Avenida Calle 80 y Avenida de las Américas.
Esta disminución representa un total de 20 vidas salvadas si se comprara el balance de fatalidades de estos cinco corredores de los últimos tres años entre octubre y febrero, en los que se registraron en promedio 58 muertes, mientras que en los últimos cinco meses esta cifra cayó a 38 muertes.
Implementación de la medida
Con la reducción de la velocidad máxima a 50 km/h en las Avenidas NQS y Primero de Mayo, se intervendrían un total de 36 km, un 7% de la malla arterial. En la NQS, se intervendrán 24 km, mientras que en la Avenida Primero de Mayo se contempla una intervención de 12 km. Se estima que la medida afecte únicamente al 20% de los vehículos que transitan en estas vías, los cuales viajan a una velocidad superior a 50km/h.
Para velar por el cumplimiento de la norma se aumentarán los puestos de control en ambos corredores, tal y como se ha venido haciendo en la ciudad desde 2016, periodo en el que los controles de la Policía de Tránsito de Bogotá han aumentado en un 200%. En las cinco vías principales en las que se redujo el límite de 50 km/h en octubre del año pasado se impusieron 733 comparendos pedagógicos y 4.752 sancionatorios al 31 de enero de este año.
“El objetivo de esta estrategia y demás acciones del Programa de Gestión de la Velocidad es proporcionar límites de velocidad más seguros en las vías de acuerdo con las características de su entorno. Con siete corredores principales con una velocidad máxima reducida, esperamos que el número de fatalidades en el tránsito en Bogotá siga disminuyendo. Solo en estas siete vías se han concentrado el 35% de las muertes en las vías de los últimos tres años. Si logramos reducir la mortalidad en estos corredores con la implementación de límites de velocidad más seguros, podremos consolidad nuestros esfuerzos por minimizar el número de fatalidades por incidentes de tránsito”, dijo Juan Pablo Bocarejo
El anuncio se hace en el marco de la visita a Bogotá de los aliados de la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial Global. Los representantes de las siete organizaciones aliadas y Bloomberg Philanthropies se dan cita esta semana en la ciudad para hacer un balance de los primeros tres años de la cooperación con la Administración Distrital en materia de seguridad vial, la cual finaliza en 2019. Los diferentes expertos en movilidad han resaltado los esfuerzos y estrategias de Bogotá por reducir las muertes en el tránsito en 15% desde 2014, con 92 vidas salvadas. Dentro de las acciones destacadas se incluye la reducción de los límites de velocidad máxima en corredores con una alta tasa de siniestralidad, medida que ha sido implementada con éxito en diferentes ciudades del mundo.
Los resultados de los límites de velocidad máxima 50km/h en otros países
La reducción de la velocidad máxima permitida en corredores urbanos ha demostrado disminuciones de hasta 45% en el número de muertes en el tránsito. El anterior es el caso de Noruega, país que logro reducir las fatalidades casi a la mitad luego de reducir los límites de velocidad a 50 km/h en vías urbanas. Por su parte, en Zúrich, Suiza, se han registrado reducciones de hasta un 25% en la cantidad de peatones muertos gracias a la implementación de límites de velocidad más seguros. La velocidad máxima de 50 km/h en corredores urbanos es una medida consolidada en países de Europa, Norteamérica, Asia y África. En Suramérica, este límite de velocidad en vías urbanas se ha adoptado en Chile, Paraguay, Ecuador, Guyana y Colombia.
Bogotá ha reducido el número de fatalidades en el tráfico en 15% desde 2014
En 2018, y por segundo periodo consecutivo, Bogotá logró reducir el número de víctimas mortales por incidentes de tránsito en un año. Con 514 fatalidades, la ciudad logró reducir las muertes en las vías en un 6% en comparación a 2017, y en un 15% con respecto a 2014, con 92 vidas salvadas en los últimos cinco años. Este balance posiciona a la capital como la ciudad que más salvó vidas en el país en este periodo de tiempo. De las ciudades principales, Bogotá con 92 vidas salvadas, seguida de Medellín, con 52, y Cartagena, con 38; fueron las únicas en las que las muertes por transito disminuyeron en los últimos cinco años, periodo en el que Colombia registró un aumento de 400 víctimas mortales en siniestros de tránsito.
El año pasado Bogotá también logró registrar la menor tasa de muertes por 100 mil habitantes de su historia, con 6,3. Este a su vez fue el registro más bajo de las ciudades principales de Colombia en 2018, año en el que el que la tasa promedio de muertes por número de habitantes fue de 13,6. La segunda tasa más baja en esta materia en ciudades principales fue la de Cartagena con 8,1, seguida de Barranquilla, con 8,8 y de Medellín con 9,6.