Aumenta la percepción de inseguridad en la capital; el mayor foco de peligro está en el transporte público
–La percepción de inseguridad en la ciudad aumentó un punto porcentual en el segundo semestre de 2018 al compararlo con el mismo periodo del año previo. En la última medición, 61% de los encuestados manifestó percibir mayor inseguridad en Bogotá.
Así lo estableció la Cámara de Comercio de Bogotá al presentar los resultados de la más reciente Encuesta de Percepción y Victimización de Bogotá (EPV)
Los habitantes de la Capital perciben que el lugar donde más se incrementó la inseguridad es el transporte público, con un 63%, el 29% considera que sigue igual y el 8% que ha mejorado.
El espacio público con establecimientos comerciales es el segundo lugar en el que los encuestados estiman que la inseguridad ha aumentado, 49% de ellos así lo manifestó, mientras que un 41% dijo mantenerse igual, y un 9% percibió que había mejorado.
Entre los espacios que los ciudadanos creen que se ha incrementado la inseguridad son las calles, 48% de los encuestados asegura que se sienten menos seguros allí, frente a un 43% que opinan que sigue igual y un 10% que asegura haber mejorado.
Ante la pregunta ¿el barrio que usted habita es seguro?, un 22% de los encuestados lo considera seguro, el 33% lo considera relativamente seguro, el 35% inseguro y el 9% muy inseguro. Resultado que es positivo para la ciudad.
Los ciudadanos opinan que el sitio del espacio público más inseguro son las calles, con un 28%; seguido de los puentes peatonales, con un 21%; los potreros, con 15%; y los paraderos y los parques, ambos con 10% cada uno.
El delito que más preocupa a los bogotanos sigue siendo el hurto, un 47% de los encuestados así lo manifestó. Así mismo, a un 10% de los encuestados le preocupa la venta de drogas y a un mismo porcentaje de la población le preocupa los homicidios.
Además, el 44% de los encuestados manifestaron que su fuente principal de información en materia de seguridad es el noticiero de televisión.
El índice de victimización total en Bogotá se mantuvo en 46 % en el segundo semestre de 2018, comparado con el mismo semestre del año anterior.
En tres de las 19 localidades urbanas (Usaquén, Tunjuelito y Chapinero) aumentó el indicador de victimización total, aproximadamente 10 puntos porcentuales, respecto al segundo semestre de 2017.
El indicador de denuncia aumentó seis puntos porcentuales, llegó a 41 %, y como en los últimos dos años se mantiene por encima del promedio histórico (33 %).
Mónica de Greiff, Presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá, destacó que “para mejorar el entorno de los negocios, la Cámara realiza desde hace más de 30 años seguimiento a temas estratégicos que impactan la competitividad de la ciudad como son la seguridad, la movilidad, la conectividad, el ordenamiento territorial y hace recomendaciones de política pública en beneficio de los empresarios y ciudadanos que se han materializado en proyectos de gran impacto como la creación de los CAI, el Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes, la Línea 123, la mediación policial entre muchos otros”.
En la medición que se realizó entre el 10 de noviembre de 2018 y 13 de enero de 2019 participaron 10.498 personas, la muestra más alta desde que se realiza esta investigación (1998), y que representa todos los estratos y localidades de la Ciudad.
Del total de encuestados, el 17% fue víctima directa de un delito, y el 29% señaló que alguien en su hogar fue el afectado. El índice de victimización total para el segundo semestre de 2018 se ubicó en 46%, es decir, no se presentó variación frente al mismo periodo del año anterior.
Dentro de la población de víctimas directas, la investigación señaló que el delito de mayor ocurrencia fue el hurto a personas, afectó al 60% de los encuestados. Le siguen en su orden el hurto a residencias (7%), las lesiones personales (5%), el vandalismo (5%), y el hurto a vehículos (5%).
En cuanto a los lugares donde más sucedieron los hurtos, la calle tiene el mayor índice con un 47%, es decir, tres puntos porcentuales por encima de lo registrado en la segunda mitad del año 2017. Le sigue el transporte público con 23%, indicador que registró que bajó 4 puntos frente a la medición del segundo semestre de 2017 cuando había sido de 27%.
El objeto más hurtado sigue siendo el celular con el 40% de los casos; luego el dinero en efectivo, con el 22%; y la billetera con el 13%.
El indicador de denuncia, que mide si las víctimas de los delitos acuden a la autoridad, se situó en 41% en el segundo semestre de 2018, un aumento de seis (6) puntos porcentuales frente al mismo periodo de 2017 cuando se ubicó en 35%.
Del total de personas que se abstuvieron de denunciar los delitos ante las autoridades, un 25% dijo haber tomado esta decisión porque el trámite “demora mucho tiempo”, el 19% lo atribuyó a lo complicado del trámite, mientras que el 17% afirmó no hacerlo por falta de confianza en las autoridades.
Institucionalidad de Seguridad y Convivencia
El 85% de los encuestados tiene una opinión desfavorable del sistema de justicia en Colombia, mientras que la opinión del 15% restante es favorable.
De la población encuestada, el 54% cree que el desempeño del sistema de justicia sigue igual, el 38% asegura que ha empeorado y solo el 8% considera que ha mejorado.
La institución con mejor percepción en su labor es la comisaría de familia, un 29% de los bogotanos cree que es buena, mientras que un 36% dice que es regular y un 35% opina que es mala.
Los ciudadanos consideran que la Administración Distrital ha tenido un buen desempeño con respecto a la dotación de la Policía Metropolitana (28%), seguido de la prevención de la violencia contra las mujeres (25%), la promoción de la participación ciudadana (23%), y la prevención de violencia juvenil (16%).
Frente a las acciones que deben priorizarse para el mejoramiento de la seguridad en la Ciudad, los encuestados creen que lo más importante es acabar con la corrupción de la Policía (24%), mejorar la justicia (14%), y aumentar las penas y el pie de fuerza, ambas con 9% cada una.
El programa de la Administración Distrital más conocido por la ciudadanía sigue siendo el Número Único de Seguridad y Emergencia (NUSE), con un 84%; seguido por la ampliación del sistema de video vigilancia, con un 33%; luego el programa de Entornos Protectores (31%) y la intervención de puntos críticos (19%).
El porcentaje de personas que dijo haber utilizado el NUSE pasó de 26% en el segundo semestre de 2017 a 25% en el mismo periodo de 2018. De quienes se comunicaron, el 44% lo hizo por motivos de seguridad, el 29% por asuntos de convivencia y el 15% por temas de salud.
El 46% de los usuarios afirma estar satisfecho con el servicio que ofrece el NUSE, frente a un 33% que no lo está. El porcentaje de usuarios satisfechos con el NUSE aumentó 4 puntos porcentuales en el último semestre de 2018 comparado con el mismo periodo de 2017.
Servicio de Policía en Bogotá
El 22% de los entrevistados acudió a la Policía durante el segundo semestre de 2018. De este total, el 40% lo hizo para denunciar un delito, el 25% para poner en conocimiento una situación y el 12% porque observó situaciones sospechosas. Entre aquellos que acudieron a la Policía, el 40% se sintió mal atendido, el 38% bien atendido y el 21% regular.
Un 40% de los encuestados manifestó no conocer el Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes (MNVCC), frente a un 55% que había dicho saber de este programa en el segundo semestre de 2017.
Del total de encuestados en esta medición, un 67% considera que el cuadrante ayudó a mejorar problemas en su barrio, mientras que en el segundo semestre de 2017 fue de 45%, es decir, hubo un aumento de 22 puntos porcentuales en este indicador.
Recomendaciones
Victimización en Bogotá
• Continuar con la medida expedida por la Alcaldía Mayor de Bogotá en octubre de 2018 que prohíbe la venta y compra de armas blancas en los espacios públicos de la ciudad, dado que se presenta una disminución significativa en el uso de arma blancas por parte del agresor, la Cámara sugiere
• Realizar intervenciones focalizadas en las localidades en las que se presenten los porcentajes de victimización más altos (Usaquén, Tunjuelito y Chapinero), a partir de un trabajo integrado de inteligencia entre la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, Policía Metropolitana de Bogotá y la Fiscalía.
• Continuar y profundizar el trabajo articulado en el territorio que permite la identificación y desarticulación de estructuras especializadas en el hurto a personas, particularmente en lugares de aglomeración de público y sistema de transporte masivo. Se recomienda fortalecer este trabajo en las localidades de Usaquén y Tunjuelito que registran el indicador de victimización total más alto, respecto a la medición anterior.
• Instaurar una mesa de diálogo y trabajo liderada por la CCB con participación de las empresas de telefonía móvil y de venta de equipos celulares, la MEBOG, la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia y la Fiscalía General de la Nación.
Percepción
• A partir del impacto que genera la comunicación en materia de seguridad, la CCB recomienda generar espacios, para la reflexión y análisis de las cifras objetivas y subjetivas de seguridad dirigidos a periodistas y directores de medios de comunicación que cubren estos temas en Bogotá.
• Visibilizar y resaltar la efectividad de las acciones asociadas al programa Entornos Protectores liderado por la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia haciendo énfasis especial en las medidas que se han tomado para mejorar las condiciones de seguridad en todos los espacios públicos. Con ello, se esperaría un impacto positivo sobre la percepción de seguridad. Algunas de estas medidas incluyen controles a establecimientos de comercio, mayor presencia policial en los entornos priorizado; y acciones de prevención como el fortalecimiento de instancias de participación ciudadana e intervenciones que promueven la cultura ciudadana, como la estrategia Farra en La Buena, entre otros.
• Identificar los factores que han permitido reducir la sensación de inseguridad en algunas localidades (Ciudad Bolívar, Barrios Unidos, Puente Aranda, La Candelaria y Mártires) y desarrollar estrategias que permitan escalar esas iniciativas y llevar las buenas prácticas a toda la capital. En este sentido de acuerdo con el modelo de análisis de la encuesta de percepción de la Cámara de Comercio de Bogotá, los factores que incidirían en la construcción de una percepción de seguridad están relacionados con las condiciones del espacio público, transporte público, convivencia ciudadana y medios de comunicación.
Institucionalidad
• En el marco del proyecto de articulación público-privada liderado por la Cámara, la Fundación Barcelona y la Secretaría de Seguridad denominado “En la Juega”, se deben mantener los programas de prevención del crimen juvenil a través de la identificación de factores de riesgo que pueden llevar a los jóvenes a las redes de criminalidad, generando una oferta integral de servicios.
• A pesar de las mejoras en la buena calificación a diferentes entidades distritales y nacionales en materia de seguridad, estos indicadores siguen siendo bajos (menos del 30%), por lo que es preciso seguir trabajando en programas que acerquen la institucionalidad al ciudadano para generar confianza y conocimiento frente a sus programas.
• Dado el buen desempeño de la administración respecto a la participación ciudadana, se deben mantener las mesas de trabajo y participación con las comunidades de los barrios en Bogotá, para generar estrategias de liderazgo colectivo y autorregulación, en torno a la prevención, seguimiento y control de todos los aspectos que afectan las condiciones de convivencia y seguridad en Bogotá.
Acerca de la CCB
La Cámara de Comercio de Bogotá es una entidad privada que desde 1878 apoya los sueños de los emprendedores y empresarios de la ciudad. Por delegación legal administra los registros públicos. Trabaja por la seguridad jurídica, por el fortalecimiento del entorno y por los intereses de los empresarios. Acompaña los diferentes ciclos de vida de las empresas y promueve los negocios en Bogotá y la Región.