El rey emérito de España, Juan Carlos I, anunció este lunes su voluntad y deseo de dejar de desarrollar actividades institucionales y completar su retirada de la vida pública a partir del 2 de junio, al cumplirse cinco años de su abdicación.
El monarca, de 81 años, comunicó a su hijo, el rey Felipe VI, esta decisión mediante una carta en la que recuerda que se cumplen cinco años de esa abdicación y subraya que desde entonces ha venido desarrollando actividades institucionales con el mismo afán de servicio a España y a la Corona que inspiró su reinado, según un comunicado del Palacio de la Zarzuela.
“Ha llegado el momento de pasar una nueva página en mi vida y de completar mi retirada de la vida pública”, resalta en la misiva.
“Desde el año pasado, cuando celebré mi 80 cumpleaños, he venido madurando esta idea, que se reafirmó con motivo de la inolvidable conmemoración del 40 Aniversario de nuestra Constitución en las Cortes Generales”, añade el rey emérito.
Ese acto solemne en el Congreso, celebrado el pasado 6 de diciembre, asegura que estuvo lleno de emoción para él y que le hizo evocar “con orgullo y admiración, el recuerdo de tantas personas que contribuyeron a hacer posible la Transición política y renovar -afirma- mi sentimiento de permanente gratitud hacia el pueblo español”.
Un pueblo que considera que es “el artífice y principal protagonista de aquella trascendental etapa de nuestra historia reciente”.
“Con una firme y meditada convicción, hoy te expreso mi voluntad y deseo de dar este paso y dejar de desarrollar actividades institucionales a partir del próximo 2 de junio”, avanza a Felipe V en la carta.
Una misiva en la que asegura que toma también su decisión “desde el gran cariño y orgullo de padre que -subraya- por ti siento”. “Con mi lealtad siempre. Un grandísimo abrazo de tu padre”, termina escribiendo Juan Carlos I.