El éxito de “Chernobyl”, serie sobre el desastre nuclear de 1986 en la ciudad ucraniana de Chernóbil, ha convertido sus lugares de rodaje en Lituania en una atracción turística fuera de lo común, pero también ha renovado la ira y la impotencia sentida por muchos de los lituanos forzados a limpiar la contaminación.
Los líderes soviéticos enviaron un estimado de 7.000 lituanos, en su gran mayoría hombres, a Chernóbil en los meses y años posteriores al desastre. Muchos fueron forzados.
Allí se unieron a otras personas provenientes de distintos lugares de la Unión Soviética para trabajar en las labores de limpieza, sin protección ni medicamentos suficientes por su exposición a los altos niveles de radiación. Muchos ahora sufren enfermedades y problemas de salud como consecuencia de ello.
Lituania, entonces parte de la Unión Soviética, estaba a 450 kilómetros de Chernóbil, en Ucrania, que también era entonces una república soviética.
Kestutis Kazlauskas, de 61 años, era un conscripto de 28 años que pasó 105 días en un campamento a unos 30 kilómetros de Chernóbil ayudando a construir una represa para filtrar la radiación de un río.
“Sentimos que íbamos a la guerra”, dijo. “Fuimos a morir allí y casi nos sorprendió volver con vida”.
La serie de televisión y los elogios de la crítica son un doloroso recordatorio de cómo el gobierno soviético y luego el lituano prestaron poca atención a los trabajadores, relataron exrescatistas.
Los trabajadores recibieron medidores de radiación defectuosos para rastrear la exposición, dijo Kazlauskas. Muchos bebieron alcohol ilegal para aliviar el estrés, a pesar de reportes de que se había fabricado con agua radiactiva.
“Mis principales problemas de salud fueron, inmediatamente, a la glándula tiroide, alta presión sanguínea y caída de dientes”, contó. Kazlauskas estableció una organización de extrabajadores para presionar al gobierno a que les diera más apoyo, como una jubilación anticipada.
Aunque el estado provee algunos beneficios si se demuestra que una enfermedad proviene de Chernóbil, los rescatistas dicen que es casi imposible de probar.
La miniserie, nominada para 19 premios Emmy el 16 de julio, muestra las consecuencias de la explosión: la vasta operación de limpieza y la investigación del desastre causado por una prueba de seguridad fallida en la planta atómica, que envió nubes de material nuclear a través de parte de Europa.
Grupos de visitantes extranjeros ahora pueden recorrer los lugares de filmación como la planta de energía Ignalina, desmantelada hace casi una década, que tiene un reactor parecido a Chernóbil y salas de control. Reuters