?En el 2015 el grupo de investigación Tecnología y Productividad, adscrito al Sistema Nacional de Investigación, Desarrollo Tecnológico e Innovación (SENNOVA) del SENA en Girardot, evidenció que las plantas de transformación de frijol de soya que apoya el SENA en la región, manejan un proceso artesanal que no permite una transformación óptima del grano para poder garantizar que los factores antinutricionales, presentes en la soya, se desactiven.
A partir de esto, decidieron realizar un proceso investigativo que permite controlar los factores físicos y químicos que requiere la soya para no producir esos factores que hacen que las personas no puedan asimilar, de la mejor manera, la proteína del cereal.
“El Instituto de Ciencia y Tecnología en Alimentos de la Universidad Nacional venía trabajando, a través de la PhD. Martha Quicazán, en la inhibición de los factores antinutricionales de la soya. Entonces nos asesoramos con ellos frente a los requerimientos necesarios para la inactivación de los mismos”, manifestó Lady Malagón Sánchez, líder SENNOVA del centro de formación de Girardot.
“Diseñamos y construimos equipos a bajo costo que nos permitieran garantizar la transformación de forma inocua y estandarizamos el proceso agroindustrial para controlar las variables de inactivación de estos factores para mejorar el proceso de producción de las plantas del programa de soya, que inicialmente fue apoyado por la Secretaria de Desarrollo Social de la gobernación de Cundinamarca”, apuntó la funcionaria.
Las plantas de transformación de frijol de soya cumplen una labor social en los municipios de la zona de influencia del SENA, ya que dan soporte a programas nutricionales a través de la entrega de más de 7.000 refrigerios mensuales para adultos mayores y niños en etapa escolar.
Por tal motivo nace esta investigación, para garantizar la calidad nutricional de la masa y bebida de soya, base de varios productos que hacen parte de los refrigerios entregados a la comunidad.
El 31 de marzo del 2017 el equipo de investigación decidió presentar todo el proceso investigativo ante la Superintendencia de Industria y Comercio para obtener dos patentes de invención, una del proceso de transformación de cereales y leguminosas para inactivar los factores anti-nutricionales, preservar la calidad nutricional y obtener bebida y masa para consumo humano, y otra para la planta que realiza dicho procedimiento (aún en trámite).
Esto se logró gracias a la participación y obtención de los beneficios del Fondo de Fomento a la Protección de Invenciones de COLCIENCIAS.
Lady señaló que “Estamos satisfechos al recibir este reconocimiento para una tecnología intangible, generalmente la Superintendencia de Industria y Comercio concede patentes de invención a productos tangibles. El SENA ya tiene algunas patentes, pero normalmente se gestionan a través de terceros, en esta ocasión fue un centro de formación el que directamente la solicitó”.
Actualmente la investigación cuenta con una planta que da soporte a los procesos de transformación de cualquier Pseudocereal (Chía, Quinua, Amaranto, entre otras), mejorando cada uno de los procesos agroindustriales (Cocción, filtrado, secado, entre otros) con el apoyo de equipos a bajo costo diseñados y construidos para tal fin.