La confirmación la hizo su hijo a través de las redes sociales: “A quienes quisieron a mi padre, Alfredo Molano Bravo, les cuento mi dolor por su partida. Hasta el último día de su vida peleó con todas sus fuerzas”.
Francisco de Roux, señaló también en twitter: “Alfredo nos dejó en el camino. Un paro cardíaco lo sobrecogió a poco después de la 1 de la madrugada. Tenía plena confianza de que seguiría con nosotros desde el misterio que nos moviliza por la verdad, la justicia y el amor y nos espera. Fue grande en la tarea hasta el último momento. Su vida hasta última hora fue la verdad de los campesinos EN LA COMISIÓN”.
Molano dedicó su vida a los estudios culturales, preocupándose esencialmente por el desentrañamiento de los orígenes y desarrollos de ciertos fenómenos sociales colombianos, en especial de aquellos que tienen su origen en ciertas minorías sociales, principalmente las campesinas.
La obra de Molano describe sucesos que tienen su escenario en la segunda mitad del siglo XX en el territorio colombiano, haciendo hincapié en cuestiones como la educación y la violencia, así como en la patente diversidad manifiesta en la construcción simbólica que signa la historia del país.
Fue uno de los escritores que se han adentrado en los orígenes de las FARC como movimiento campesino liberal en el sur del Tolima que defendía su tierra de los ataques del establecimiento colombiano, principalmente desde del asesinato del líder Jorge Eliécer Gaitán el 9 de abril de 1948.
En el 2014 Molano recibió el Doctorado Honoris Causa por parte de su alma máter, la Universidad Nacional de Colombia
En 2016 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar, gran premio a la “Vida y obra de un periodista”.