La primera reunión sostenida entre el Ministerio de Transporte y las plataformas digitales como Uber, DiDi, Beat, Cabify y Mí Águila, no tuvo ésxito pues terminó con cero avances. Sin embargo, se conocieron propuestas para regular esta actividad.
Uber señaló en un comunicado que: «Este proceso participativo, donde por primera vez se escucha la perspectiva de varios de los actores es un avance de cara a buscar soluciones en el largo plazo, pero, lamentablemente, no representa una solución para Uber, ya».
Mientras que Beat, indicó que: «las plataformas agradecen la reunión que hace el gobierno para debatir los temas de regulación de la industria».
También agregó que: «Fue una primera escucha a las posiciones de todos, desde Beat vamos a estar participando activamente y no solamente esta reunión, sino de las siguientes invitaciones que nos haga el gobierno para construir de manera asertiva una regulación en la que quepamos todos los actores y se prioricen las necesidades de los ciudadanos».
Bruno Ocampo González, cofundador y CEO de Mi Águila, del servicio de transporte especial (taxis blancos), dijo que: «Diferentes aplicaciones aseguran que simplemente son una herramienta de conectividad entre usuarios y los socios conductores y buscan desvirtuar por completo el transporte público y el transporte individual, esto no quiere decir que ellos no tengan la razón, pero basado en la reglamentación actual eso tampoco quiere decir que los que vienen de afuera o con músculo financiero no deban respetar la institucionalidad».
El 14 de enero Uber emitió un comunicado donde advirtió que el proyecto para reglamentar las plataformas digitales anunciado en las últimas horas por el Gobierno, no alcanzaría a desarrollarse en el tiempo en que la aplicación dejaría de funcionar en Colombia.
Uber destacó que en el transcurso que se surta el proceso en el legislativo, la plataforma dejaría su funcionamiento, afectando a los conductores asociados, así como a los usuarios.
«La única plataforma que no operaría si se escoge exclusivamente el camino legislativo, sería la aplicación de Uber, lo cual dejaría a 88.000 socios conductores registrados en la aplicación sin la oportunidad de generar ganancias adicionales para el sustento de sus familias y a dos millones de usuarios sin la opción de elegir cómo se mueven por las ciudades, a partir del 31 de enero de 2020», indicó la plataforma.
Además advirtió que las aplicaciones disponibles en Colombia deberían contar con las mismas condiciones, para que todas hagan parte del proceso de construcción de un marco normativo, «que involucren regularizar el servicio, exigiendo unos básicos, que es lo que se tiene que exigir para tener unos servicios de transporte que garanticen la seguridad del usuario».