Veinticinco nuevas muertes por el nuevo coronavirus se han producido en Hubei, lo que eleva a 131 los muertos por la enfermedad en esta provincia del centro de China donde comenzó la epidemia, anunciaron este miércoles las autoridades locales.

Un total de 840 nuevos casos de infección han sido confirmados en la misma provincia, con lo que ya son más de 5.300 los pacientes en todo el país, según la misma fuente.

El presidente chino, Xi Jinping, dijo el martes al jefe de la Organización Mundial de la Salud que el nuevo coronavirus es un “demonio” y que su país confía en ganar la batalla contra la enfermedad.

Xi agregó que cree que la OMS y la comunidad internacional entregarán una evaluación “tranquila, objetiva y racional” del virus, reportó la TV estatal.

Cada vez más países están planeando evacuar a sus ciudadanos de Wuhan, la ciudad de 11 millones de habitantes donde se inició el brote. Un avión privado con personal del consulado estadounidense dejará la zona el miércoles, dijo una portavoz de la embajada norteamericana en Pekín.

El jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, y Xi discutieron formas de proteger a los ciudadanos chinos y extranjeros en las áreas afectadas por el coronavirus y “posibles alternativas” a evacuaciones, dijo un portavoz de la OMS.

“El virus es un demonio y no podemos dejar que el demonio se oculte”, dijo Xi, citado por la cadena estatal de televisión.