Colombia registró un comportamiento mixto en sus cifras de desempleo en enero, con una caída en el área urbana y un incremento en las zonas rurales, en medio del crecimiento desbalanceado entre las diferentes ramas económicas, informó el Departamento Nacional de Estadísticas – DANE.
El desempleo urbano disminuyó a un 12,9% en enero, desde el 13,7 % en igual mes del año pasado.
Se trata del segundo mes consecutivo de reducción del indicador en las zonas metropolitanas y es la tasa de desempleo más baja para enero en cinco años.
La tasa de ocupación en la zona urbana aumentó a un 57,2% en el primer mes del año, en comparación con un 56,4% en enero de 2018, mientras la tasa global de participación -que contabiliza a las personas con empleo y las que están en busca de él-, aumentó a un 65,6%, desde un 65,3%.
“Estamos viendo unas señales de transición del mercado laboral”, dijo en una presentación el director del DANE, Juan Daniel Oviedo.
El experto atribuyó la disminución en el desempleo urbano a una mayor contratación en los sectores relacionados con alojamiento y servicios de comida, relacionados en parte con el aumento del turismo, así como un buen desempeño en el sector manufacturero.
La cuarta economía de América Latina se expandió un 3,3% el año pasado, uno de los mejores desempeños en la región y para 2020 el Gobierno estableció una meta de 3,7%.
No obstante, el desempleo nacional, que contabiliza tanto el área urbana como la zona rural, aumentó a un 13% en enero, por encima del 12,8% en el mismo mes de 2018, debido a un deterioro del empleo en el comercio minorista y de pequeñas superficies, así como en el sector agropecuario.
En este país de 50 millones de habitantes se contabilizó un total de 21,5 millones de personas con empleo y 3,21 millones de desempleados dentro de la población económicamente activa. Reuters