
La Encuesta de Arquitectura Social Estratégica permitió conocer el estado de la inversión social privada en Colombia; identificar las fortalezas y debilidades de las estrategias sociales; reconocer los retos y las oportunidades que tiene la ANDI en su objetivo de fortalecer la gestión de las empresas en el país; y finalmente, comparar los resultados objetivos este año con las dos mediciones hechas en 2015 y 2017.
“Desde la ANDI y su Fundación queremos compartir el resultado de este ejercicio, para que, de una forma coherente con las necesidades del sector privado, y entendiendo la diversidad, las dificultades y las oportunidades que se presentan, podamos aportar y fortalecer la gestión social de las empresas que tienen la capacidad de transformar a Colombia”, aseguró Bruce Mac Master, Presidente de la ANDI.
La Encuesta evidenció que, del total de empresas encuestadas, 63% asegura que su estrategia social está alineada con la operación del negocio y 78% desarrolla proyectos en su zona de influencia. Respecto a la forma de abordar los temas sociales de las empresas, 86% dijo que lo hace a través de programas dirigidos a los empleados y/o sus familias (76% para 2017); 76% mediante estrategias de responsabilidad social (77% en 2017); 61% a través de filantropía (64% para 2017); 43% emplea el voluntariado (35% en 2017); y 23% con nuevos negocios de alto impacto (36% para 2017).
El informe presentado por la Fundación ANDI también permitió conocer que las empresas han brindado especial atención a grupos como: población en situación de pobreza y pobreza extrema (52%); empleados y familia de empleados (45%); niños, niñas y adolescentes de 6 a 17 años (39%); primera infancia de 0 a 5 años (20%); adulto mayor (18%); jóvenes de 18 a 25 años (17%); población víctima de la violencia (17%); mujeres (16%); personas en condición de discapacidad (11%); grupos étnicos (7%); personas en ruta de reincorporación (5%); fuerza pública retirada (2%), y otros (9%).
En cuanto a la inclusión de población vulnerable, 40% de las empresas encuestadas aseguró que tiene acciones para adherir a estos grupos en la operación del negocio, siendo el empleo la principal forma de vinculación (91%), seguido por su inclusión como proveedores de la cadena de valor (22%), y las compras operativas a emprendimientos de población vulnerable (15%). Estas acciones se dirigen especialmente a personas en condición de discapacidad (64%); población en situación de pobreza y pobreza extrema (33%); personas víctimas del conflicto armado (24%); grupos étnicos (12%); personas en ruta de reincorporación (8,5%); fuerza pública retirada (2%) y otras (6%).