La Cámara de Representantes de Estados Unidos ha iniciado un debate sobre la destitución del presidente Donald Trump por su papel en el asalto al Congreso la semana pasada.
Por su parte, Donald Trump ha rechazado cualquier responsabilidad por los actos de violencia que se desataron en el lugar. El motín del miércoles pasado ocurrió después de que Trump dijera a sus partidarios en una reunión en Washington DC que “luchen como el infierno” contra el resultado de las elecciones del mes de noviembre.
Los demócratas acusan al presidente de alentar a sus seguidores a atacar el edificio del Capitolio donde cinco personas murieron. También se sumaron a la iniciativa algunos republicanos que dicen que lo acusarán el miércoles formalmente por incitar a la insurrección.
Dado que los demócratas tienen la mayoría en la Cámara, es probable que la votación sea aprobada. “Se nos ha pedido que hagamos la vista gorda ante la criminalidad, la corrupción y el flagrante desprecio del estado de derecho por parte del presidente tirano que tenemos en la Casa Blanca”, dijo la representante demócrata Ilhan Omar en el debate de la Cámara. “Nosotros, como nación, ya no podemos apartar la mirada”.
Aunque cinco republicanos en la Cámara han dicho hasta ahora que respaldarán el juicio político, la mayoría sigue siendo leal al presidente. “En lugar de avanzar como una fuerza unificadora, la mayoría en la Cámara está eligiendo dividirnos más … Miremos hacia adelante, no hacia atrás. Unámonos, no nos separemos”, dijo el republicano Tom Cole a la Cámara, uno de los 139 republicanos que la semana pasada votaron en contra de aceptar el resultado de las elecciones de 2020 y la derrota de Trump.