Se trata de un sustanciador que hacía parte del despacho del entonces saliente Procurador Fernando Carillo Flores, sobre quien pesaba una denuncia por posible delito de concusión y cuyas investigaciones ya se venía adelantando por parte de la Fiscalía general de la Nación, tras la denuncia del mismo senador afectado

Según el Director Especializado contra la Corrupción, Eduar Alirio Calderón, esta captura se da luego de las indagaciones que adelanta el ente acusador contra algunos servidores de esa entidad, quienes al parecer actuaban de manera ilícita en el despacho del ex procurador general, entre ellos dos abogados más.

A este funcionario, quien según la Fiscalía estaría inmerso presuntamente en el delito de concusión, se le venían haciendo los seguimientos a través de interceptaciones avaladas por un juez de la República y otras labores de policía judicial, permitió sumar suficientes pruebas que evidenciarían la probable actuación irregular del servidor en los hechos ocurridos en diciembre de 2019.

Para ese entonces, el sustanciador, en ejercicio de su función y a través de 2 personas, al parecer exigió 300 millones de pesos a un senador de la República, con el fin de resolver a su favor un proceso disciplinario por el que, en primera instancia, fue sancionado cuando ejerció en otro cargo público en el año 2012.

En la Investigación, la Fiscalía logró encontrar que el funcionario capturado, al parecer, vendría asesorando y trabajando con terceros para obtener sentencias de tutelas en contra de la Procuraduría, por lo que también se investiga a dos abogados que habrían participado en la exigencia del dinero, además de un tercer abogado, quien posiblemente estaría encargado de presentar dichos recursos judiciales.

Por: Carlos Martínez