Nuestras embajadas y consulados no deben ser premios, sino espacios de trabajo para construir la comunidad colombiana en el exterior: Petro
Los consulados y las embajadas de Colombia no pueden ser un premio, sino centros de trabajo que sirvan para relanzar y construir la comunidad colombiana en el exterior, manifestó este domingo el Presidente Gustavo Petro, quien se reunió con los compatriotas residentes en Nueva York.
Agregó que las representaciones diplomáticas y consulares de Colombia en todo el mundo “tienen que ser espacios de trabajo, liderados por gente trabajadora”, y resaltó que “por eso decidimos nombrar como Representante Permanente ante las Naciones Unidas, aquí en Nueva York a una dirigente indígena”, Leonor Zalabata.
“Los consulados, las embajadas, ya no pueden ser un premio dado, ya no pueden entregarse por derecho familiar hereditario casi, ya no pueden ser los recintos, los lugares, los palacios, los espacios bien adornados donde los que siempre han gobernado a Colombia, excluyendo a la mayoría de su nación, creen que tienen derecho a poseer”, expresó el Jefe de Estado, quien inició una visita a Nueva York para participar en la 77ª Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Que estas embajadas, que estas representaciones, que este Presidente de la República que aquí llega a dialogar con ustedes, sean sintomáticos de una nueva era, de una nueva posibilidad: la de relanzar, la de construir con todo el poder posible la comunidad colombiana en el exterior”, dijo.
El Mandatario estuvo acompañado por Donovan Richards, Presidente del condado neoyorquino de Queens, en el que reside un importante número de ciudadanos colombianos.
El Presidente Petro destacó la designación de Leonor Zalabata, perteneciente al pueblo arhuaco, como Embajadora en la ONU, y de Luis Gilberto Murillo, oriundo del departamento del Chocó, como Embajador en Washington.
Subrayó que “nunca antes en esa silla de esa oficina representación de Colombia se había sentado un indígena, una indígena, una mujer sabia, una mujer humilde, una mujer del trabajo, proveniente del corazón del mundo: la Sierra Nevada de Santa Marta. Y el Embajador de Colombia ante los Estados Unidos, como Donovan, es un descendiente de las luchas afro de toda América: Luis Murillo”.
“¿Cómo va a nombrar un negro?, decían allá en Bogotá. ¿Cómo va a nombrar una indígena?, allá en Bogotá decían. Pues, he aquí que los hemos nombrado, he aquí que esta es la representación del pueblo colombiano y he aquí que tienen una gran responsabilidad: la responsabilidad de transformar las embajadas y consulados de los Estados Unidos en centros de trabajo”, sostuvo.
Y agregó que “es la trabajadora, es el trabajador el que allí debe llegar y sentirse dueña y dueño del lugar; es la comunidad colombiana, la que vive, ojalá, legalmente en este país, y la que vive ilegalmente en este país la que debe encontrar en esos pisos, en esos cuartos y habitaciones, en esas sillas, descanso, ayuda, solidaridad, organización”.
El Presidente se refirió a la “realidad que viven centenares de millones de personas de todos los pueblos del mundo, que también vive el pueblo colombiano, cuando tiene que salir de su país por X, Y razón; luchar, luchar y luchar en tierras extrañas”.
Por último, anunció que el Diálogo Regional será también fuera del país, con la comunidad colombiana, para analizar la tarea del Gobierno. “Aquí hemos venido a eso y hemos venido a hablar con ustedes. No será la última vez, es la primera”, puntualizó.