La Unidad Administrativa Especial para la Gestión del Riesgo de Desastres de Cundinamarca (UAEGRD) socializó un nuevo reporte en el que detalla la situación actual de los municipios afectados por las fuertes lluvias ocurridas durante la tarde y la noche del miércoles 26 de octubre.
Además de las afectaciones informadas en las últimas horas en Girardot, El Rosal, Cajicá, Madrid, Pandi, La Vega y Albán, a esta hora se presentan emergencias por inundaciones, deslizamientos, vendavales y crecientes súbitas, en los siguientes puntos del departamento:
Facatativá: inundación por la creciente de la quebrada Mansilla que afecta siete centros educativos y tres comunitarios; y deslizamiento con consecuencias para un centro educativo.
Arbeláez: deslizamiento sobre la vía, afectando tres puntos: veredas La Olla y San Miguel y Casa Blanca.
La Vega: creciente súbita, afectando 27 predios y seis vías.
Zipaquirá: deslizamiento en la vereda San Jorge. Se adelanta censo para determinar las afectaciones.
Sasaima: se presenta vendaval el cual deja caídos árboles y cuerdas de electricidad.
Nemocon: creciente súbita de los ríos Crema y Neusa, afectando la empresa REDIL.
Nocaima: creciente súbita por cuenta del Río Gualivá, inundando el centro poblado y afectando aproximadamente tres casas.
San Francisco: creciente súbita del Río Cañas afectando una casa con pérdida total. Vías cerradas por colapsó de alcantarilla.
Bituima: deslizamiento que se encuentra en etapa de valoración.
Cachipay: deslizamiento por el desbordamiento de la quebrada Dulce.
Tena: deslizamiento que afecta una vivienda y algunas vías.
Granada: inundación en la zona urbana y rural
La Mesa: creciente súbita de la quebrada La Dulce, afectando varias casas
Silvania: creciente súbita con afectaciones en casas
Fusagasugá: inundación en el casco urbano y en el matadero.
Tocaima: el Río Bogotá alcanzó un nivel de 4.8. Se hizo monitoreo toda la noche y sobre la 1 a.m. inicio el descenso.
Desde el Centro de Información y Telecomunicaciones (CITEL) las autoridades mantienen constante monitoreo de la situación y coordinan acciones de respuesta, así como evaluando deslizamientos de tierra y caída de árboles, así como brindando asistencia inicialmente en la evacuación de las aguas de dentro de las viviendas, y valorando los daños y vulnerabilidades, buscando prevenir la ocurrencia de emergencias adicionales en todos los 116 municipios del departamento.