Capturan a 5 integrantes de la banda de ‘los Solís’; distribuía narcóticos en entornos escolares en Cundinamarca y Bogotá
–Una acción articulada entre la Seccional Cundinamarca de la Fiscalía General de la Nación, la Policía Metropolitana de Bogotá y el Ejército Nacional permitió desarticular la red delincuencial conocida como “los Solís”, responsable de mover cargamentos de marihuana y cocaína desde municipios de Cauca hacia Cundinamarca y Bogotá.
Labores de policía judicial lideradas por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Seccional Cundinamarca, con seguimientos e interceptaciones a línea telefónicas, permitieron identificar y capturar a cinco de los presuntos articuladores de esta red ilegal.
Ellos son William Cataño Giraldo, Michel Valentina Muñoz, Johan Alexander Carillo Quito, Carlos Alberto Rodríguez Reyes y Harold Andrés Parra Parad, alias “payaso”, presunto cabecilla de la banda y quien se encargaba de financiar la actividad ilícita y conseguir los estupefacientes.
Estos sujetos fueron capturados en diligencias de registro y allanamiento adelantadas en la localidad de Suba (Bogotá) donde se incautaron 163 millones de pesos en efectivo; marihuana, cocaína y drogas sintéticas, tres armas de fuego, municiones, celulares y elementos para dosificar la droga.
La Fiscalía imputó a los procesados como presuntos responsables de los delitos de concierto para delinquir; y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Según la investigación, los estupefacientes eran adquiridos en el suroccidente del país y trasladado a puntos de acopio donde lo dosificaban, prensaban y ocultaban, para luego trasportarlo a Fusagasugá, Soacha, Sibaté (Cundinamarca); y posteriormente a Bogotá para abastecer las denominadas ollas de vicio.
La Fiscalía constató que la red narcotraficante reclutaba personas parar adherirle al cuerpo las sustancias ilegales. También eran usados vehículos de transporte público para camuflar los envíos en maletas o compartimentos especialmente diseñados para burlar las autoridades viales.
Los Solís serían responsables de mover una tonelada de alucinógenos al mes. Para esto tendrían alianzas con estructuras dedicadas al narcomenudeo, muchas de las cuales negociaban los alijos, inclusive, antes de salir de Cauca.
El ente acusador cuenta con información que evidencia cómo esta estructura ilegal camuflaba marihuana, cocaína y éxtasis en dulces o alimentos que eran comercializados en entornos escolares induciendo al consumo a niños, niñas y adolescentes.
En el curso de la investigación, a la red delincuencial le fueron incautados varios cargamentos de estupefacientes.