Internacional Tema del Día

Terminó la tregua rusa por la Navidad ortodoxa sin cese de combates en Ucrania

-Moscú realizó “una operación de represalia” tras el ataque ucraniano contra un acuartelamiento ruso. Fueron aniquilados más de 600 militares ucranianos.

–La tregua unilateral declarada por Rusia por la Navidad ortodoxa concluyó sin haberse dado el cese de combates en Ucrania. Tanto las autoridades ucranianas como el Pentágono acusaron a a Moscú de no respetar desde el principio el alto el fuego unilateral, que no sería, según Kiev, sino una “tapadera” para reagrupar fuerzas.

Los ucranianos celebraron este sábado la Navidad ortodoxa bajo el embate de la guerra, algunos en refugios, y la tregua unilateral rusa de 36 horas que concluyó a la medianoche del sábado al domingo (hora local) sin que durante la jornada cesaran los combates.

El alto el fuego, anunciado de manera unilateral por Rusia, se terminó a las 21H00 GMT, en medio de críticas cruzadas de los ucranianos a los rusos de no haberlo respetado y de Moscú a Kiev por no haber dejado aplicarlo.

“El mundo pudo comprobar otra vez lo engañosas que son las declaraciones de los altos mandos en Moscú”, aseguró el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en un mensaje de video publicado en las redes sociales.

Rusia “habló de un presunto alto el fuego, pero en realidad bombardeó en Bajmut (este del país) y otras posiciones ucranianas”, criticó Zelenski.

Tras el anuncio del alto el fuego por parte del presidente Vladimir Putin, el primero desde el inicio de la ofensiva rusa en febrero, las autoridades ucranianas pusieron en duda la sinceridad de la tregua y consideraron que se trataba de una táctica para ganar tiempo.

Estados Unidos, Francia, Alemania y Reino Unido también criticaron la iniciativa.

Periodistas de la AFP presentes en Chasiv Yar, en el este de Ucrania, constataron reiterados bombardeos a lo largo de la mañana.

En Bajmut, una zona álgida de combate situada más al norte, la AFP escuchó el viernes intercambios de artillería en ambas partes del frente, horas después de que se instaurara el alto el fuego unilateral decretado por Rusia.

No obstante, los tiros fueron de menor intensidad en comparación con días anteriores.

Según la fiscalía ucraniana, dos personas murieron y 13 resultaron heridas el viernes en Bajmut, una ciudad en gran parte devastada por los combates y donde ambos lados están sufriendo importantes pérdidas.

Las fuerzas armadas rusas bombardearon también la región de Jersón (sur) el viernes, matando a un socorrista e hiriendo a siete personas, informaron las autoridades ucranianas.

Los dos países, en guerra desde febrero de 2022, celebraron el sábado la Navidad ortodoxa, religión que profesan la mayoría de sus ciudadanos.

Por el lado ruso, Putin asistió solo a la misa en una iglesia del Kremlin la medianoche del viernes, apartando su costumbre de concurrir a una liturgia en público en una provincia o en la periferia de Moscú.

En un mensaje divulgado este sábado por el Kremlin, el líder ruso felicitó a los cristianos ortodoxos e indicó que este día inspira “buenas acciones y aspiraciones”.

Las organizaciones eclesiásticas “apoyan a nuestros soldados que participan en una operación militar especial”, declaró el presidente ruso, utilizando el término oficial del Kremlin para designar la ofensiva en Ucrania.

En Kiev, cientos de fieles asistieron este sábado a una misa histórica en el célebre monasterio de las Cuevas, que antes dependía del patriarcado de Moscú.

La homilía fue oficiada por primera vez por Epifanio, líder de la Iglesia ortodoxa ucraniana formada en 2018-2019 tras un cisma con el patriarcado de Moscú.

Zelenski expresó su felicidad por el hecho de que tantas personas asistieran a una misa en el día de una Navidad ortodoxa que es “histórica para Ucrania, por la independencia religiosa de su pueblo”.

“Hemos esperado mucho tiempo para que este santuario nos fuera entregado. Es un acontecimiento verdaderamente histórico, que todos los ucranianos esperaban”, contó a la AFP Veronika Martiniuk, de 19 años, que dirige el coro.

“Cada país tiene su iglesia. Y tenemos nuestra propia iglesia, está muy bien, una iglesia ucraniana, así debe ser”, abundó Oksana Sobko, una creyente de 47 años.

Estados Unidos, principal apoyo del gobierno ucraniano, prometió el viernes una nueva ayuda militar de 3.000 millones de dólares a Ucrania, que incluirá vehículos blindados de infantería Bradley, blindados para transporte de tropas y obuses.

Alemania también enviará en el primer trimestre del año 40 blindados “Marder” y Francia prometió el miércoles tanques de combates ligeros AMX-10 RC.

El gobierno británico anunció que organizará en marzo una cumbre de ministros de Justicia para debatir sobre posibles medidas para apoyar a la Corte Penal Internacional para que investigue los crímenes de guerra en Ucrania.

Moscú realiza “una operación de represalia”

El Ejército ruso ha realizado una “una operación de represalia” tras el ataque ucraniano contra un acuartelamiento cerca de Donetsk durante la noche de Año Nuevo, informó este domingo el Ministerio de Defensa de Rusia.

Desde el organismo señalaron que los medios de reconocimiento rusos descubrieron y confirmaron emplazamientos de despliegue temporal de militares ucranianos en la ciudad de Kramatorsk. Así se supo que más de 700 militares ucranianos se encontraban en el albergue número 28 y más de 600 en el albergue número 47 en la ciudad, precisó la cartera de Defensa.

De esta forma, más de 600 militares ucranianos fueron aniquilados como consecuencia de un ataque con misiles contra dichos emplazamientos, agregó el organismo.

Las fuerzas de Kiev lanzaron la noche de Año Nuevo un ataque con lanzacohetes múltiple HIMARS, de fabricación estadounidense, contra la ciudad de Makéyevka, en la República Popular de Donetsk. Un objetivo del ataque fue una escuela de formación profesional donde permanecía acuartelado un grupo de militares rusos.

Según datos del Ministerio de Defensa ruso, 89 de sus soldados murieron producto de esas hostilidades. (Información DW y RT).