La Policía Nacional anunció en las últimas horas que la meta de erradicación de cultivos ilícitos para 2023 es de 20 mil hectáreas, mientras que para 2022 fue de 50 mil hectáreas, lo que equivale una caída del 60 por ciento con respecto al año inmediatamente anterior.

La cifra la entregó el mismo director de Antinarcóticos coronel Edgar Cárdenas Vesga, quien precisó que para el 2022 se cumplió con una meta de 43.600 hectáreas.

“El año pasado la meta era de 50 mil hectáreas y alcanzamos alrededor de 44 mil. Esto tiene que ver en ese cambio de afectación estructural multicrimen que va directamente relacionado a la afectación de sus finanzas, a través de procesos de lavado de activos y de extinción de dominio y también de la incautación de sustancias estupefacientes”, explicó el director de la Policía Antinarcóticos.

El coronel Cárdenas precisó que esta meta se toma para cumplir con los lineamientos del Gobierno nacional en materia de erradicación de cultivos ilícitos, junto con la política de seguridad de disminuir la erradicación forzada y hacer más énfasis en la interdicción.

El alto Oficial explicó que en el 2022 la meta que se fijó no se alcanzó como consecuencia de los bloqueos que se presentaron por parte de la comunidad. Por esta razón se estaría buscando una aproximación diferente a esta situación desde la institucionalidad.

“Estamos estimando las órdenes del presidente Gustavo Petro, quien ha sido enfático, sobre todo, en la afectación a las estructuras multicrimen; es decir, que vayan relacionadas directamente con la interdicción y allí es donde estará la fortaleza de la Policía Nacional”, señaló Cárdenas.

Finalmente, el coronel Cárdenas anunció que se insistirá en los operativos de interdicción como la incautación de sustancias estupefacientes como clorhidrato de cocaína, base de cocaína o marihuana, insumos químicos y operativos de control en puertos y aeropuertos, muy lejos de las metas que en años anteriores se registraban con la cooperación de los Estados Unidos.

Precisamente, en el más reciente informe que entregó el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (SIMCI) de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), da cuenta de un incremento del 43 % en el área sembrada con coca en el país, pasando de 143.000 hectáreas (ha) en 2020 a 204.000 ha en 2021.

De igual manera, reveló que la producción potencial de clorhidrato de cocaína también alcanzó su máximo histórico con 1.400 toneladas, manteniendo la tendencia al incremento que viene consolidándose desde 2014.