Durante el encuentro con líderes y lideresas del Suroeste Antioqueño, que se realizó en Jericó, el presidente Gustavo Petro señaló de ‘etnocidio‘ los casos de violación sistemática de niños y niñas indígenas que ocurrieron en el Guaviare.

“No es una actividad clandestina hecha contra la misma familia, la misma comunidad, sino que se han alcanzado, de ahí la sistematicidad del problema, niveles de complicidad de la misma comunidad, que no ve otro camino que prostituir a sus propios niños para obtener comida” indicó el Jefe de Estado.

Estableció que no es sólo un delito del Código Penal, sino un etnocidio que está acabando con comunidades como los Nukak Makú. Y no se habla de la muerte de personas, se trata de la muerte cultural.

El pasado viernes, Petro ordenó que viajara una comisión especial del ICBF y de la Presidencia de la República al Guaviare, para atender las denuncias de violencia sexual contra menores de edad. Y señaló que se adelantarán las investigaciones pertinentes para dar con los responsables.