Si bien Shakira abandonó la propiedad que tenía en Barcelona y se instaló en Miami con los niños, los problemas no dejan de aparecer. Recientemente, se supo que Clara Chía, la tercera en discordia de la relación y actual pareja de Piqué, tuvo una nueva jugada.
Ella y sus amigas le hicieron “la cruz” a la cantante y, semanas atrás, en diálogo con el periodista español Roberto Antolín reveló el apodo que le pusieron a Shakira.
“Vieja bruja menopáusica. Ese es el nombre que recibe”, sostuvo el comunicador. Según advirtió, el segundo nombre era por la bruja que la cantante puso en el balcón de su casa en Barcelona y que daba precisamente a la casa de sus exsuegros. Asimismo, advirtió que Clara Chía estaba “recibiendo tratamiento psicológico porque la está superando” la situación: “Ella es ajena al mundo mediático y de repente ‘boom’ ha llegado a eso. No se siente cómoda”. Incluso contó que la pareja fue a comer a un restaurante japonés y el dueño los echó porque era fan de Shakira.
Ante la forma en la que Shakira se refirió a ella en la canción que entró al Guinness, Martí buscó una forma de atajarse, por lo menos en el ámbito privado.
“Shakira y Piqué llevaban mucho tiempo sin tener relaciones sexuales. Esto lo usa para defenderse Clara Chía con su entorno de amigas”, comentó el periodista español.
Otro dato importante es que el apodo en cuestión sería también una revancha por la forma en la que Shakira supo referirse a la joven en la intimidad, puesto que ya la conocía dado que trabajaba con Piqué.
“La llamaba ‘la mosquita muerta’; así le decía Shakira a Clara Chía puertas para adentro cuando le hablaba a su pareja”, sostuvo en su momento Antolín.