Foto: Alcaldía de Bogotá
Desde el pabellón 5A de la Feria Internacional del Libro de Bogotá – FILBo la alcaldesa (E) Edna Bonilla Sebá anunció que, por invitación de la UNESCO, la capital del país será sede del Segundo Encuentro de la Red de Ciudades de Aprendizaje.
Esta red se constituyó formalmente en febrero de 2023 por los Alcaldes, intendentes y presidentes municipales de las más de 30 ciudades reconocidas por la UNESCO, en una sesión coordinada por la UNESCO e impulsada por las ciudades miembro de México, Argentina, Colombia, Ecuador y Perú.
Desde que comenzó esta red regional, Bogotá tomó un puesto de liderazgo como ciudad coordinadora de clúster de discusión sobre educación para la ciudadanía mundial y el desarrollo sostenible.
La Alcaldesa Mayor (E) afirmó que “Bogotá fue escogida porque ha demostrado un liderazgo en materia educativa, porque hemos demostrado con hechos, con presupuestos, con infraestructura educativa”.
Recordó la mandataria encargada que la presente Administración dejará 35 colegios nuevos o restituidos, y 35 más en estudios o diseños. “Hoy, Bogotá tiene más de 26.000 estudiantes en 50 instituciones de educación superior. Eso ninguna otra ciudad lo ha hecho”, sostuvo Bonilla Sebá.
Agregó la funcionaria que “Bogotá le genera oportunidades a sus ciudadanos y ciudadanas, y si muchas personas no han terminado sus estudios, en Bogotá los pueden hacer, en Bogotá se puede ser”.
Explicó Bonilla que el trabajo en torno al cuidado también es importante en Bogotá, “por eso desde cuando de la UNESCO nos llamaron, nos reconocieron que la capital del país es una ciudad maravillosa, que cuida. Nunca es tarde para estudiar, para recuperar los aprendizajes, para estudiar lo que nos gusta”, indicó.
El modelo de salud al barrio, apuestas por una educación integral del ser y el saber, la transversalización del enfoque ambiental y la atención integral a salud mental fueron algunas de las buenas prácticas que le mostraron al público internacional que el distrito ha avanzado con pasos agigantados en la consecución del Objetivo 4 de Desarrollo Sostenible: Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
Bogotá ha puesto la educación en primer lugar, y eso significa el esfuerzo y el trabajo del Distrito con aliados, con la comunidad educativa, con los padres y madres de familia.
Estos espacios son de gran importancia para el desarrollo de políticas públicas, pues, además de generar oportunidades de replicar buenas prácticas que han funcionado en contextos similares, también permiten aprender de los aciertos y errores de otras ciudades y seguir poniendo la educación de nuestra ciudad, en primer lugar.
Por primera vez, Bogotá entrega 139 mil libros a estudiantes de 1º, 2º y 3º para fortalecer sus capacidades lectoras
Como parte de las actividades en el Pabellón LEO Bogotá de Corferias durante la FILBo, 139 mil niños y niñas de 1º, 2º y 3º grados y sus maestras y maestros se beneficiaron con la entrega de la colección ‘Aprendamos Todos a Leer’, estrategia que llega al 76 % de la población escolar matriculada en esos grados.
Con una inversión de más de 2.377 millones de pesos, la Secretaría de Educación de Distrito (SED) ratifica su compromiso de lograr que las niñas y los niños de Bogotá aprendan a leer y escribir antes de los 8 años.
Esta entrega del programa ‘A, E, I Aprendo a leer y escribir: Plan de Fortalecimiento de la Lectoescritura’ de la SED, busca garantizar el derecho a la lectura y la escritura antes de esta edad que es la propicia para hacerlo. Para esto se hace una intervención en los grados de 1º a 3º.
Durante el conversatorio la profe Edna Bonilla exaltó que “con esta apuesta no nos limitamos al enorme esfuerzo pedagógico y financiero que ha implicado entregar estos materiales, se trata de un acompañamiento integral a cada colegio. Queremos que nuestras niñas y niños lean, escriban y se comuniquen como corresponde de acuerdo con su edad y que las capacidades logradas por ellas y ellos contribuyan a generar una ciudadanía lectora, informada y crítica”.
Esta dotación de libros está llegando con 134.993 libros a estudiantes y 4.891 libros a docentes en 246 colegios de todas las localidades de la ciudad, con una cobertura del 76% de la matrícula de 1°, 2° y 3°.
“La lectura nos hace a un lado y nos permite observar y observar el asimismo y escribir para tener una herramienta para defender mis derechos”, comentó el escritor Ivar Da Coll. Agregó que “el Estado ha hecho un buen papel en lo que tiene que ver con los derechos a la lectura y escritura sin embargo al carecer de mayor acceso a libros de bajo costo y preocuparse más por promover los libros de autores colombianos”.
Estos materiales, adaptados para la Secretaría de Educación del Distrito por el Banco Interamericano de Desarrollo está conformado por el libro guía para los docentes de estos tres grados y el libro del estudiante para los niños y las niñas de estos mismos grados.
En la guía se propone un trabajo sistemático sobre diversas tipologías textuales y áreas curriculares para la enseñanza de la lectura y la escritura, además de compartir recursos didácticos adicionales que permiten enriquecer el aprendizaje y rúbricas de evaluación para que el docente pueda establecer qué aprendizajes están consolidados y cuáles requieren ser reforzadas.
En el libro del estudiante se trabaja por medio de secuencias didácticas organizadas en rutinas de aprendizaje que facilitan el desarrollo de las habilidades de la lectura y la escritura a través de diferentes tipos de textos, con enfoque multicultural y de género.
También se contará por parte de la Secretaría con asesoría a las instituciones focalizadas en temas relacionados con el desarrollo de habilidades de liderazgo en las y los directivos, la incorporación de la evaluación en el aula para conocer el estado de los aprendizajes de las y los niños, prácticas docentes en el aula, estrategia de formación y actualización permanente en temas de lenguaje.
“Estos no solo son libros, vienen con metodologías para la enseñanza. Nosotros hacemos una evaluación de impacto y sabemos que esto va a ayudar a que los niños aprendan a leer y escribir mejor. Ese efecto se va a perpetuar en los siguientes grados de la primaria”, aseguró Carolina Méndez del BID en Colombia. Además, exaltó la labor de los docentes. “Enseñar no es una labor fácil, los maestros hacen una hermosa labor y ellos contarán con una guía para su trabajo en el aula”.
Esta estrategia cuenta con pruebas que se aplican a las y los estudiantes antes y después del programa. En la última cohorte se encontró que se lograron cerrar brechas en las habilidades de lectoescritura entre las y los estudiantes. Es de exaltar que los resultados mostraron una mejora significativa en el promedio de habilidad de los estudiantes: para primer grado la calificación promedio mejoró en un 82 % y 146 % para tercer grado de escolaridad.
Estos datos tienen un valor muy relevante en tanto que muestran que ellas y ellos se apropiaron de habilidades como el principio alfabético, la fluidez, la relación grafema -fonema y los niveles básicos de comprensión y producción textual.